Catalina Nieves Muñoz es una onubense que nació hace 62 años en Minas de Riotinto, su localidad natal, en la que se desarrolló su niñez y juventud. Su madre, de La Dehesa de Riotinto, se llamaba María Muñoz González, mientras que su padre, Silverio Nieves Domínguez, era de Minas de Riotinto. Un matrimonio que tuvo cuatro hijos, siendo Catalina la más pequeña.

Su padre trabajaba en las oficinas de las minas, pero, poco a poco, la empresa se fue quedando sin trabajo, hasta que su familia decidió marcharse a vivir a Madrid, después de que a su padre le ofrecieran un empleo en la sede que Explosivos Río Tinto tenía en el Paseo de la Castellana de la capital. Fue así cómo, hace 45 años, Catalina dejó la Cuenca Minera para convertirse en una madrileña de adopción, dado que se instaló con sus padres y sus hermanos en Móstoles, donde continúan viviendo, tanto ella como dos de sus hermanos, ya que el tercero falleció.

De sus inicios en Madrid, esta riotinteña recuerda que “al principio lo pasamos muy mal, porque fue un cambio muy grande para todos. Es verdad que en Huelva no teníamos de nada, pero éramos felices. Tanto era así que mi padre siempre hablaba de jubilarse y marcharse de regreso a Huelva. Tenía mucha nostalgia de su tierra”.

Sin embargo, su padre falleció muy pronto -no descarta que esa nostalgia también le influyera- y nunca pudo hacer realidad su sueño. Y lo cierto es que a ella le está pasando exactamente igual. Es más, asegura que, a medida se hace más mayor, más se acuerda de la provincia de Huelva y, en particular, de la Cuenca.

“Mis dos hermanos tenían la carrera de Maestro, por lo que Madrid parecía un destino mucho más atractivo que Huelva para que encontraran trabajo. Poco a poco, nos fuimos adaptando a Madrid, pero aquí las cosas tampoco son tan fáciles como se pueda pensar”, nos cuenta Nieves Muñoz, que, a pesar de todo, reconoce que “Madrid es un lugar muy acogedor con la gente de fuera. Eso sí, la alegría de Huelva no se ve por aquí”.

Catalina también hizo su vida en Madrid, donde se casó, -aunque, en la actualidad, está divorciada-, y tuvo un hijo, llamado Nazario Fernández Nieves, que le ha dado dos nietos. Una familia que no ha querido perder sus raíces, tanto que su hijo ha venido en varias ocasiones a la Cuenca Minera, una zona que le gusta mucho, y donde ha visitado a sus familiares.

Sin embargo, esta riotinteña suele venir poco a Huelva, pero, nos cuenta, “ahora mi hijo me ha hecho un perfil en Facebook y esto me permite estar en contacto con toda mi gente de allí, además de enterarme de todo lo que pasa en Huelva, así que estoy encantada con la labor que hacen las redes sociales. Porque me gusta todo lo que sea de Huelva y, sobre todo, de la Cuenca Minera. Sólo de pensarlo se me pone la carne de gallina”.

Junto a las redes sociales, Catalina mantiene un contacto directo con sus primas, especialmente con Fidela Quirós Nieves, que tiene dos hijas y que sigue viviendo en Huelva, así como otra prima que vive en Sevilla.

Además, “tengo una muy buena amiga en La Dehesa. Se llama María de las Mercedes Alonso Ramírez y es buenísima para mí. Es más que una hermana, porque, aunque es más joven que yo, nos hemos criado juntas. Nos conocemos de toda la vida. Es buenísima”, afirma.

Con todo ello, por su experiencia, Catalina Nieves aconseja a todos los onubenses que “no se vayan nunca de Huelva, porque es una tierra maravillosa y luego se van a arrepentir. Soy consciente de que allí hay poco trabajo, pero, a veces, podemos tener muchas cosas materiales, aunque lo verdaderamente importante podemos dejarlo lejos”.

En cualquier caso, esta riotinteña, madrileña de adopción, se muestra muy contenta de poder dirigirse a todos sus paisanos, “porque lo que más feliz me hace es hablar y que me hablen de Huelva”.