A muchos les sonará la cara de José Manuel García Almeida por haber sido durante más de un año y medio el endocrino y nutricionista de cada viernes en el programa de TVE ‘Saber vivir’, durante la etapa en la que lo presentaba Mariló Montero. Lo que muchos no sabrán es que este conocido médico, jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición en el Hospital Quirón de Málaga y endocrinólogo del Hospital Virgen de la Victoria de Málaga, es natural de Huelva y, en concreto, de El Campillo.

Un profesional que se decantó por la Medicina, porque “era algo que me gustaba desde siempre. Realmente, desde joven me habían atraído las ciencias, a la vez que me encantaba el trato con la gente, por lo que pensé que estudiando Medicina podía desarrollar perfectamente estas dos facetas. Es cierto que en mi familia no había ningún médico, pero, a pesar de ello, me gustó esta carrera”.

Estudió en la Universidad de Sevilla, especializándose en Endocrinología y Nutrición, dos ramas muy completas y que considera fundamentales, puesto que la primera estudia el funcionamiento de las hormonas y la segunda, el metabolismo, de ahí que sea un gran conocedor de problemas tan habituales como la diabetes, la obesidad, el tiroides, el metabolismo o la celiaquía. Y, más concretamente, es experto en el tratamiento de la cirugía bariátrica, nutrición clínica y tratamiento hospitalario de la diabetes.

Pero es curioso que, anteriormente, al acabar la carrera, García Almeida realizó la especialización en Medicina Familiar vía MIR en el Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva. De hecho, estuvo tres años como médico de familia en el Juan Ramón, así como en el Centro de Salud del Molino de la Vega de la capital. En concreto, estuvo viviendo en Huelva hasta 1997, año en el que se marchó a Málaga, donde continúa residiendo en la actualidad. Fue en Málaga, en el Hospital Universitario Carlos Haya, donde se especializó en Endocrinología y Nutrición Clínica, también vía MIR.

En Málaga hizo la Residencia en el Carlos Haya, para después pasar al Hospital Universitario Virgen de la Victoria, donde lleva quince años siendo el Responsable de Nutrición Clínica. Un trabajo que compagina con la Jefatura del Servicio de Endocrinología y Nutrición en el Hospital Quirón Málaga. Por este motivo, el balance que hace de todo este tiempo en la capital malagueña es muy positivo, porque “Málaga es una tierra muy acogedora. Son muy parecidos a los onubenses, me identifico mucho con esta cultura abierta, muy fenicia, de puerto, de gente que entra y sale. Es cierto que la Cuenca está más en la Sierra, pero yo estudié en el instituto en Huelva capital y eso también se nota. Y los malagueños son personas que se dejan querer”.

A todo ello hay que añadir, como hemos comentado, que este médico onubense estuvo más de un año colaborando con el conocido programa de TVE ‘Saber Vivir’, en la etapa en la que fue presentado por Mariló Montero. “Fue una experiencia muy buena, muy interesante. Mi misión era hablar de nutrición y de cuestiones como la diabetes y, aunque no era mi medio natural, la verdad es que fue positivo. Todo aporta”, según nos dice, al tiempo que nos cuenta que “siempre reivindicaba en el programa que soy de Huelva, una tierra única llena de contrastes, con mar y sierra”. Una etapa en la que se convirtió en un rostro conocido y, de hecho, aún lo reconocen por la calle.

En cualquier caso, tras más de veinte años en Málaga, donde vive con su mujer, Mera Martínez Alfaro, y sus dos hijos, nacidos allí, Marina, de 17 años, y Jesús, de 12, se siente muy querido en la provincia malagueña. Eso sí, reconoce que no pierde sus raíces onubenses. Todo lo contrario. Según nos cuenta, “mi familia la tengo en El Campillo. Allí están mis padres y uno de mis hermanos, mientras que mis dos hermanas viven en Huelva. Así que ahí tengo mis raíces, por lo que paso algunas temporadas en Huelva, como, por ejemplo, en Navidad”.

En general, reconoce que “soy un gran defensor de todo lo onubense. Por ejemplo, la comida. Soy un amante del jamón y las gambas, que siempre los compro en Huelva y me los traigo a Málaga. Pero, además, la cultura minera siempre me ha atraído mucho. Es una zona que me encanta y a la que añoro, porque es un lugar donde se ha desarrollado mucho la cultura, quizás por ese espíritu británico que lo impregna. A pesar de estar alejada de la capital, son muchas las personas que han estudiado una carrera en la comarca y que desarrollan actividades de gran interés”. Es más, “en el hospital tengo dos compañeras de Huelva, Mónica y Pilar, con las que tengo muy buena relación. Los médicos choqueros nos cuidamos entre nosotros”.

Por todo ello, para despedirse, José Manuel asegura que “me siento muy orgulloso de mi tierra. Creo que es fundamental defender nuestras raíces, porque hay muchos motivos para sentirse afortunado de pertenecer a la Cuenca Minera. Cuestiones como el mineral, la agricultura o el desarrollo intelectual tan notable de la zona son algunos puntos a tener en cuenta. Por este motivo, yo siempre llevo mi Huelva por delante”.