Con varias viviendas y amplísimos talleres a su alrededor, era una de las de mayores dimensiones y tenía como cometido el cambio de locomotoras para paliar el desgaste del viaje entre Huelva y Riotinto

La Estación de Manantiales, junto a la que había viviendas y amplísimos talleres, está situada a medio camino entre Huelva y Riotinto. Su cometido era el cambio de locomotoras en el recorrido del viaje.

En concreto, la Estación de Manantiales era el final de las locomotoras que venían desde Minas de Riotinto, con dirección al Puerto de Huelva.

Ubicada a un kilómetro al sur del puente Manantiales, la estación del mismo nombre estaba a la mitad del recorrido ferroviario entre Riotinto y Huelva. Está formada por media docena de casas y por la propia estación, separadas entre sí por algo más de un centenar de metros, viviendas que se encuentran en estado ruinoso.

Se trató, en definitiva, de un punto estratégico del itinerario de la línea ferroviaria entre Huelva y Riotinto, pudiéndose ver, en ocasiones, el cruce de dos convoyes. Incluso, está considerada como una de las mayores dimensiones de todas las estaciones de este ferrocarril.

A pesar de su importancia histórica y patrimonial, la zona ha sido objetivo del espolio en muchas ocasiones, por lo que en muchos de sus tramos de vías han desaparecido, estando sus construcciones, en muchos casos, en estado de abandono.

Un lugar para recordar, dado su papel fundamental en la actividad minera de la Cuenca y de toda la provincia de Huelva de otro tiempo.