Los vestigios hallados ponen de manifiesto que las personas que vivieron en este poblado romano de Riotinto eran “muy parecidos a nosotros”, destacan desde Atalaya

Los vestigios encontrados en las excavaciones arqueológicas que está realizando Atalaya Riotinto Minera en el yacimiento de Cortalago siguen deparando sorpresas gracias a los elementos hallados, que “dan constancia de que las personas que vivieron en épocas tan distantes a la nuestra eran, en el fondo, muy parecidos a nosotros”.

Así lo han comunicado desde la propia compañía a través de su nuevo boletín informativo, en el que aseguran además que los vestigios encontrados muestran a veces “una cara más íntima y familiar de la vida de aquellos mineros romanos que nos precedieron”, al tiempo que prueban cómo “durante milenios sucesivas civilizaciones arribaron las minas de Riotinto atraídas por su metal”.

Dirigidas por los cuatro arqueólogos y 18 auxiliares de Atalaya, las excavaciones de este poblado romano anexo a la corta de Cerro Colorado son parte del Proyecto Global de Gestión del Patrimonio presente en la mina y tienen como objetivo aumentar el conocimiento científico que se tiene de la presencia romana y su actividad extractiva.

El proyecto, que comenzó hace dos años, se encuentra actualmente en su ecuador, una vez excavada y documentada la denominada Fase I del poblado, según han explicado desde la compañía, que estima que la inversión final superará los cuatro millones de euros.

Lucernas

De entre los restos materiales que se han rescatado en las excavaciones de Cortalago, Atalaya Riotinto Minera se ha referido algunos de los más “representativos de la vida diaria de nuestros predecesores”, como las lucernas, “empleadas para iluminar el hogar o el tajo en oscuras y angostas galerías. Las mineras son de más capacidad; contenían más aceite y otorgaban mayor autonomía y tiempo de iluminación”, añaden.

Entalles de anillo

“El adorno nos acompaña desde la Prehistoria y particularmente en época romana simbolizaba status social”, explican desde Atalaya, que informa que “en Cortalago hemos localizado entalles de anillo en buen estado de conservación”, entre los que “destaca el de Quirón, el centauro maestro de héroes, o el que representa la cabeza de Jupiter Amon, realizados en ornalina”.

Agujas

En hueso labrado, durante las excavaciones se han encontrado alfileres (aci crinalis) para elaborar peinados o sujetar vestimentas, según época y posición social, así como agujas (aci) y punzones (subulae) destinados a la artesanía textil, además de lígulas y espátulas para el aseo o uso quirúrgico y como aplicador de perfumes y ungüentos o para limpieza de los oídos.

Tablillas de aprendizaje

Otro de los objetos encontrados en estas excavaciones es una tablilla de aprendizaje en las que los habitantes de estas tierras en época romana aprendían matemáticas, gramática, filosofía u oratoria, tal y como se pone de manifiesto en esa tablilla, que “nos ofrece un retazo de esa escena escolar”, destacan desde la empresa.

Juegos

Tras las duras jornadas de trabajo, los antiguos pobladores romanos buscaban el esparcimiento, el descanso y el juego (ludus), tal y como se pone de manifiesto a través de las fichas de un tablero de juego juego (ludus ladrumentarum) y un dado de hueso hallados en estas excavaciones.

Pinzas metálicas

Fabricadas en bronce o hierro, eran parte del instrumental quirúrgico del medicus para extraer suciedad, restos o cuerpos extraños de las heridas, eliminar esquirlas de hueso, sostener la gasa, limpiar la sangre, etc. Además, las de menor tamaño servían para depilar.

Una vez realizado esta primera mitad de los trabajos, desde el Proyecto Riotinto se sienten “orgullosos de ser custodios de este legado”, han destacado desde Atajaya Riotinto Minera, al tiempo que ha manifestado que “trabajamos decididamente en la investigación, protección, conservación, revalorización y difusión del importante patrimonio histórico que atesora la mina”.

“Creemos en la necesidad de preservar el Patrimonio y tenemos la certeza de que tiene un papel estratégico en la necesaria diversificación económica de la comarca”, han continuado desde la compañía, que recuerda que el Proyecto Riotinto “está en una zona declarada Bien de Interés Cultural, por lo que, en paralelo a las operaciones mineras, el equipo trabaja en la gestión de este y sus elementos relevantes de acuerdo con las autoridades en materia de Cultura y Patrimonio, que revisan mensualmente el trabajo realizado”, añaden.

Por último, la empresa explica que “el proyecto comenzó con una primera prospección, identificando las evidencias arqueológicas a intervenir”, tras lo que “se redactó un Proyecto Global, dando cumplimiento a la legislación”, que “básicamente implica”, agregan, lo siguiente:

  • El control Arqueológico del movimiento de tierras, donde un arqueólogo externo supervisa la carga de material en la mina, en previsión de la aparición de estructuras antiguas
  • El seguimiento de los avances de las operaciones y su afección al patrimonio industrial, el seguimiento arqueológico, que documenta todos los bienes presentes en su área de influencia
  • La realización de medidas compensatorias para poner en valor el patrimonio con intervenciones arqueológicas diferenciadas.