Da el visto bueno a la solicitud del Ayuntamiento del municipio, en el que hay documentadas 352 víctimas del franquismo

La posible exhumación de las víctimas del franquismo de El Campillo está más cerca que nunca de convertirse en una realidad. La Junta de Andalucía ha dado el visto bueno a las primeras intervenciones en la fosa común del municipio, por lo que en un primer momento llevará a cabo trabajos de indagación, localización y delimitación de la misma, pasos previos a la futura exhumación, estudio antropológico de los cuerpos e incluso identificación genética de los mismos, que se pondrían en marcha en el caso de que los primeros trabajos concluyan que es técnicamente posible.

La Consejería de Presidencia, Administración Local y Memoria Democrática ha respondido así satisfactoriamente a la solicitud realizada a finales del pasado mes de junio por el Ayuntamiento de El Campillo, que, tal y como ya informó Tinto Noticias -el periódico digital de la Cuenca Minera de Riotinto-, pidió a la Dirección General de Memoria Democrática, perteneciente a la citada Consejería, que lleve a cabo los trámites necesarios para la indagación, localización y exhumación de la fosa común del municipio, situada en el cementerio de la localidad, así como la posterior identificación de los restos y entrega de los mismos a sus familiares.

La solicitud, realizada por la alcaldesa, Susana Rivas, se basó en el “compromiso” del Consistorio campillero con la “dignificación de las víctimas del franquismo” y en la “certeza” de que existe una fosa común en el camposanto campillero en la que fueron depositados los cuerpos de personas asesinadas por los golpistas durante la guerra civil española, indicó la propia Rivas, quien también señaló en su escrito, al que tuvo acceso este periódico, que “hay documentadas 352 víctimas del municipio”, para lo que se basa en una investigación histórica realizada por el que fuese alcalde de la localidad, Fernando Pineda, y publicada en 2016 en el libro ‘Memorias Recuperadas. El Campillo-Salvochea’. El Campillo, llamado por entonces Salvochea, “sufrió una brutal represión por los militares golpistas de julio de 1936, hasta el punto de desaparecer hasta el nombre”, relata Rivas, tras lo que señala que la localidad “fue incendiada y bombardeada a finales de agosto de 1936”.

En la propuesta realizada por la alcaldesa se adjuntaba además una solicitud de exhumación remitida al Ayuntamiento por parte de un familiar de una de las víctimas del franquismo, concretamente por parte del campillero Francisco Javier Sánchez Rubio, quien pidió la exhumación de la fosa común para poder rescatar los restos de su tío Dámaso Sánchez Tarriño y “darle una sepultura digna, reparando así su memoria”. En concreto, el solicitante explica en su escrito, al que también tuvo acceso este periódico, que su tío “desapareció de su casa el 31 de diciembre de 1936 tras ser detenido por los falangistas y conducido al depósito carcelario”, así como que tiene constancia de que “fue fusilado en la Calle de Sevilla de ese municipio, siendo enterrado después en la fosa común del cementerio municipal de El Campillo”, tras lo que “su familia ha sufrido en silencio durante tantos años sin tener la certeza de su asesinato ni poder enterrar dignamente sus restos”, añade.

La propuesta de la alcaldesa también iba acompañada de la relación de asesinados en el municipio y de un escrito del investigador antes citado, Fernando Pineda, quien, en calidad de presidente de la Asociación de Memoria Histórica de la Provincia de Huelva, daba su apoyo a la solicitud formulada por la regidora campillera. “La dignificación y reparación moral de las víctimas es muy importante para quienes nacimos allí y tuvimos conocimiento de la atroz represión sufrida en el antiguo municipio de Salvochea, actual El Campillo”, indica.

La solicitud ha sido tomada en consideración por el Comité Técnico de Coordinación encargado de evaluar y coordinar actuaciones en torno a la recuperación de la Memoria Histórica y el reconocimiento institucional y social de las personas desaparecidas durante la Guerra Civil y la Posguerra, tras lo que la Consejería de Presidencia, Administración Local y Memoria Democrática ha dado el visto bueno a esta actuación, tal y como próximamente será publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), una medida con la que el Gobierno andaluz pretende “profundizar con mayores garantías y celeridad en el cumplimiento y objetivos de la Ley de Memoria de Andalucía”.

Esta aprobación se produce poco después de llevarse a cabo un trabajo similar en las fosas comunes de Nerva, cuyos resultados fueron presentados la semana pasada y pueden consultarse a través de esta publicación. Además, la Junta de Andalucía también aprobó, el pasado mes de marzo, la indagación-localización y delimitación de fosas del franquismo en Minas de Riotinto, tal y como puede apreciarse en esta otra información.