María Eugenia Limón se reúne con la patronal minera y asociaciones del entorno para abordar la moción aprobada para la mejora ambiental del territorio

La presidenta de la Diputación provincial de Huelva, María Eugenia Limón, se ha reunido con la patronal minera AMINER y las entidades del entorno para abordar la necesidad de acometer la recuperación ambiental de los terrenos degradados como consecuencia de la actividad minera histórica. En este sentido, todos los presentes han manifestado su apoyo a la moción recientemente aprobada para avanzar en la mejora de la calidad ambiental del territorio.

Acompañada por el vicepresidente, Juan Antonio García, al encuentro han asistido la gerente de la patronal minera (AMINER), Priscila Moreno; Juan A. Millán Jaldón y Jorge Forné, en representación de la Asociación de Comunidades de Regantes de Huelva (COREHU); Laura Pichardo y Manuel Domínguez, de Aguas Urbanas Mancomunidad MAS-GIAHSA.

La presidenta de la Diputación de Huelva, ha comenzado señalando la necesidad de recuperar este territorio, “vital para el desarrollo socioeconómico presente y futuro de la Cuenca Minera”. Por esta razón la Diputación acordó por unanimidad en el pleno del pasado mayo, instar a la Junta de Andalucía a la ejecución inmediata de un plan de restauración de zonas mineras degradadas por operaciones históricas en la cuenca del río Odiel.

“Nuestro objetivo como gobierno provincial es conseguir la recuperación medioambiental, empezando por mejorar la calidad del agua de la futura presa de Alcolea, de acuerdo con las propuestas de organismos científicos y técnicos, como la realizada por el Departamento de Ciencias de la Tierra de la Facultad de Ciencias Experimentales de la Universidad de Huelva”.

Limón ha señalado que esta actuación se enmarca en el compromiso de la Diputación de Huelva con los ODS de la Agenda 2030, “para hacer de Huelva una provincia económica, social y medioambientalmente sostenible”.

En dicha moción se ha solicitado al gobierno de la Junta de Andalucía que dichas actuaciones se financien con presupuesto propio, con los fondos europeos del nuevo marco financiero, e incluirlo dentro de la financiación transferida por el Gobierno de España para la gestión que le corresponde a la Junta de Andalucía del Fondo de Recuperación Europeo, a través del Mecanismo de Recuperación y Resilencia y del fondo de Ayuda a la Recuperación para la Cohesión y los Territorios de Europa.

Estas restauraciones supondrán una mejora de la calidad ambiental del territorio de los municipios de la Faja Pirítica Ibérica afectados por los pasivos mineros históricos, así como la puesta en valor de minas abandonadas que se convertirán en un atractivo para inversores. Todo ello contribuirá a generar empleo local, fijando la población en el territorio y favoreciendo el retorno de jóvenes que en su día emigraron por falta de trabajo, siendo un gran revulsivo sobre todo para municipios pequeños de menos de 5.000 habitantes contemplados en las medidas de apoyo a la España Vaciada.

Todos coincidieron, asimismo, en la necesidad de mejorar la calidad de las aguas de los ríos Chanza y Odiel, reduciendo los lixiviados de minas y canteras abandonadas. En cuanto al Río Tinto, se ha considerado un tratamiento diferenciado dada su especial condición natural.

Priscila Moreno, gerente de Aminer, destacó que los proyectos mineros en activo tienen el compromiso de reducción de la carga contaminante que está fijada en las respectivas autorizaciones ambientales unificadas de las compañías que actualmente operan en la provincia, “lo que supone una oportunidad para revertir impactos del pasado”. Asimismo, señaló que la reactivación de proyectos mineros tipo “Brownfield” redundará positivamente en la consecución de una mejora sustancial de las masas de agua del entorno.

En este sentido, Moreno hizo hincapié en las sinergias entre proyectos mineros nuevos y la regeneración de pasivos mineros heredados del pasado, que serán una oportunidad para la mejora en la calidad de las masas de aguas del entorno, aludiendo a varios ejemplos que lo ponen de manifiesto. Por ello, ha subrayado que la puesta en marcha de los proyectos actualmente en explotación, “lejos de ser un problema ha supuesto la mejor solución para corregir situaciones del pasado, con la eliminación paulatina de los lixiviados, y en particular de los proyectos actualmente en explotación”.

Actualmente, en la provincia de Huelva hay activos proyectos de exploración en más de una veintena de municipios, nuevos yacimientos que, según subrayó “si se les eliminara las cargas actuales de los pasivos mineros y se resolvieran las caducidades de actuales concesiones, permitiría la entrada a nuevos inversores que tienen sus miras puestas en el territorio onubense”. Asimismo, aportó un borrador de anteproyecto de Restauración de Pasivos mineros afectados por la minería histórica, “que permitiría establecer criterios de identificación y evaluación”.

Priscila Moreno también aludió a que, además de la recuperación del medio ambiente, el atractivo minero de la zona es una fuente de explotación científica, turística y cultural, que pueden convertir el proyecto experimental en un referente internacional. Para su desarrollo, apuntó a la necesidad de captar fondos a través de la propia Diputación Provincial y su interlocución con el Instituto para la Transición Justa dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la Junta de Andalucía y entidades de la Unión Europea. Asimismo, todas las entidades acordaron trabajar de forma conjunta mediante la puesta en marcha de una comisión de trabajo que analice la identificación de entornos afectados por la actividad minera histórica, así como las prioridades de actuación designando a la Diputación de Huelva como entidad pública integradora de los proyectos.

Por parte de Juan Antonio Millán presidente de COREHU, manifestó que la recuperación ambiental será apoyada por comunidades de regantes y agricultores del Andévalo y toda Huelva, ya que ello además de mejorar los suelos degradados recuperándolos para otras actividades la agricultura y montes, reducirá los actuales lixiviados de minas abandonadas, y contribuirá a mejorar la calidad del agua de los ríos y aun más de los embalses de Chanza, Andévalo, Olivarga, Sancho, Agrio y Alcolea en construcción teniendo en cuenta que la calidad de estas aguas embalsadas son prepotables por efecto de la auto-depuración natural por dilución que eleva el PH a 6,3 y de los efectos físico químicos y de inhibición bacteriana que eleva el PH de forma irreversible hasta 7.

Manuel Domínguez, representante de MAS-GIAHSA trasladó a la Presidenta de la Diputación Provincial y a todos los asistentes, su apoyo a todos los proyectos transformadores que aborden soluciones a problemas medioambientales de la provincia de Huelva, además si son estructurantes desde el punto de vista ambiental y patrimonial, que generan riqueza y empleo, como es el caso de la recuperación de los terrenos degradados de la actividad minera histórica, subrayando “por ello siempre estaremos dispuestos a aportar nuestro conocimiento y apoyo a dichas iniciativas, dentro del marco de la colaboración y cooperación institucional.”

Al término de la reunión, se acordó constituir una Mesa Técnica de trabajo compuesta por expertos de la Diputación y externos de reconocido prestigio en este ámbito y la colaboración de AMINER, COREHU y GIAHSA, con el objetivo de identificar los entornos afectados por la actividad minera histórica y establecer unos criterios de valoración que permitan priorizar las zonas donde actuar.