Pedro Masera y Enrique Herrada fueron ejecutados en 1938

El sindicato CGT ha solicitado la exhumación de los restos de los mineros Pedro Masera Polo (El Cerro del Andévalo) y Enrique Herrada Domínguez (Minas de Riotinto), víctimas represaliadas y asesinadas durante la dictadura, que se encuentran en una fosa del cementerio de Nuestra Señora de Soledad de Huelva.

Según ha informado el sindicato a Tinto Noticias, la petición se ha realizado, a través del Ministerio de Presidencia, en nombre de los descendientes de los enterrados como primer paso para el cumplimiento de lo establecido en la Ley 20/2022 de Memoria Democrática.

Las familias de estas víctimas se han puesto en contacto con el sindicato, que acusa al Ayuntamiento de Huelva de “pasividad a pesar de estar localizadas las fosas a las que fueron arrojados los cuerpo”. El sindicato ha recordado que los trabajos de exhumación se iniciaron en el pasado pero que “quedaron incompletos y paralizados, dejando a las familias sin ningún tipo de solución a pesar de que diferentes normas avalaban la continuación de las exhumaciones”.

En la recientemente aprobada Ley de Memoria Democrática se establece la obligación de la Administración de llevar a cabo las labores de exhumación como una parte más de la justicia para con las víctimas de la Dictadura, pero en este caso, añade CGT, el Ayuntamiento de Huelva, a través de la Concejalía de Hábitat urbano e infraestructuras, responsable de llevar a efecto este cometido, “han decidido desoír a las familias en las reuniones mantenidas y dilatar sin fecha el cumplimiento de la normativa legal”.

Tras petición de los familiares de los fusilados Pedro Masera y Enrique Herrada la organización sindical se ha dirigido a la Alcaldía para pedir información sobre sus exhumaciones y para recordarle “la obligación de la administración de recuperar los restos de estas personas represaliadas, pero hasta este momento, desde la alcaldía o desde ninguna otra concejalía se ha dado contestación a la petición de cita”.

En ese sentido, en sindicato ha insistido en que “por mucho que quieran ponerse impedimentos al objetivo final de resarcir a las familias de las víctimas a través del silencio a sus peticiones, las reclamaciones continuarán hasta conseguir que por fin se cumpla con la Ley”.

Pedro Masera fue el primer minero ejecutado que se buscó en el Cementerio de la Soledad de Huelva. A pesar de que los equipos forenses hallaron restos humanos, las pruebas de ADN certificaron que finalmente no era el minero ejecutado en 1938. Por ese motivo, la familia ha solicitado que se continúen con los trabajos que quedaron inconclusos.

Por su parte, Enrique Herrada, natural de Cerro del Andévalo, era calderero en la Cuenca Minera y también fue sentenciado a muerte en 1938, según los archivos sobre la Memoria Histórica.

CGT Huelva considera que la petición de exhumación es un paso más dentro de todo el trabajo que se está realizando por parte de muchas organizaciones desde hace décadas, lo cual demuestra “que no ha sido precisamente dejación de los colectivos memorialistas el hecho de que a día de hoy sigan existiendo decenas de miles de víctimas en cunetas y fosas, muchas de ellas identificadas y reclamadas por sus familiares”, han señalado.

Para CGT Huelva es inexplicable, como así se ha denunciado desde estamentos internacionales, que a día de hoy “España siga ostentando el extraño honor de estar situada entre los tres primeros estados a nivel mundial en número de desaparecidos”.

Proyectos como ‘Todos los nombres’, recalcan, dan cuenta de “miles de víctimas de la dictadura, algo que tiene que hacernos reflexionar sobre la dimensión del problema que supone no actuar, como lleva haciendo el Ayuntamiento de Huelva, durante décadas”. En su página web todoslosnombres.org pueden localizarse más de cien mil represaliados y represaliadas de la dictadura, muchos de ellos en de la provincia de Huelva.