La FOE destaca el «interés socioeconómico» de la planta de compostaje de Riotinto

Green Soil Solutions mantiene un encuentro con la Federación Onubense de Empresarios para darle a conocer el proyecto y las oportunidades de desarrollo para el territorio

El director general de Green Soil Solutions (GSS), David González, ha mantenido una reunión con el presidente de la Federación Onubense de Empresarios (FOE), José Luis García-Palacios Álvarez, con el objetivo de darle a conocer los detalles y el estado de tramitación en el que se encuentra actualmente el proyecto para la construcción de una Planta de Compostaje en la localidad de Minas de Riotinto.

En lo que respecta al empleo, el proyecto estima la contratación de 20 personas de forma directa, así como unos 40 puestos de trabajo indirectos vinculados a la actividad, «priorizando empleo local y de calidad», han destacado desde la propia compañía a través de una nota de prensa.

Además, la Planta de Compostaje de Minas de Riotinto contempla en su plan industrial una inversión de cinco millones de euros para la construcción de unas infraestructuras dotadas con las «últimas tecnologías» destinadas a la fabricar suelos fértiles y compost, productos que se emplearán también en la corrección de la calidad de las aguas y la regeneración de espacios degradados por la actividad minera histórica.

La empresa destaca que el proceso de fabricación es completamente natural y confinado al 100% para evitar cualquier tipo de molestia, para lo que se emplean como materias primas los lodos de las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR), cenizas de biomasa, restos de biomasa y tierras. Además, la futura planta contará con capacidad para dar un servicio esencial a toda la provincia de Huelva y otras zonas cercanas de Andalucía.

González ha valorado de forma «muy positiva» este encuentro y el «buen talante» mostrado por la FOE a la hora de “resaltar el interés social y económico con el que cuenta este proyecto para el desarrollo de la comarca”.

Asimismo, el director general ha puesto en valor “la aportación de la planta al empleo, la innovación y la diversificación del tejido empresarial de la comarca a través de una actividad basada en la sostenibilidad”, al tiempo que ha incidido «en las oportunidades de colaboración con otras empresas auxiliares del territorio que fomentan el empleo indirecto y el desarrollo económico en torno a un sector que cuenta con gran proyección de futuro”.

Por su parte, desde la Federación Onubense de Empresarios han manifestado su satisfacción por la presencia de estas compañías en la comarca que «vendrán aportar valor añadido a la economía, generando empleo, y apostando por la sostenibilidad, como es el caso que nos ocupa».

Destacan la «nueva oportunidad» de inversión, empleo y desarrollo sostenible en la Cuenca Minera

La Planta de Compostaje que promueve Green Soil Solutions en Riotinto se encuentra en pleno proceso de tramitación de la AAI

El proyecto para la construcción de la Planta de Compostaje en Minas de Riotinto que está promoviendo la empresa Green Soil Solutions (GSS) se encuentra en pleno proceso de tramitación de la «restrictiva» Autorización Ambiental Integrada en la Junta de Andalucía, que es el organismo que cuenta con las competencias al respecto. La compañía ha desarrollado en los últimos meses una campaña de comunicación con la finalidad de desmentir los «bulos» que a su juicio se publicaron en su día respecto a su actividad, así como para trasladar los objetivos y los detalles técnicos de esta iniciativa empresarial a distintos sectores de la sociedad.

La creación de empleo, la inversión en un proyecto industrial de futuro mediante la aplicación de las técnicas más innovadoras y el respeto al medio ambiente son las bases del modelo de negocio basado en la sostenibilidad presentado por la empresa, todo ello con la finalidad de fabricar suelos fértiles que permitan regenerar aguas y espacios degradados y dotar a la Cuenca Minera de Riotinto de «una nueva oportunidad de desarrollo sostenible y de empleo de calidad».

El plan industrial de la compañía contempla una inversión inicial de cinco millones de euros para la construcción, dentro del Proyecto Riotinto, de una infraestructura «pionera» en Andalucía que estará dotada de las «mejores técnicas disponibles» para la fabricación de suelos y «adaptada a los requisitos de seguridad y medioambientales que marca la legislación europea y española, la más exigente del mundo».

La generación de empleo asociada al proyecto es otro de los «puntos fuertes» destacados por la empresa, no solo por la cantidad de puestos de trabajos, sino por la calidad de los mismos. La compañía tiene prevista la contratación directa de más de 20 trabajadores, así como unos 40 empleos indirectos vinculados a la actividad.

La planta cumplirá dos objetivos principales: por una parte, fabricar suelos fértiles, y por otra, dar servicio a la sociedad de la provincia de Huelva al emplear como materias primas, principalmente, los lodos de las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR), cenizas de biomasa, restos de biomasa y tierras.

El plan de la empresa contempla que estos materiales sarán tratados mediante un proceso de compostaje natural y sin empleo de ninguna sustancia química, acorde a las políticas de economía circular que se están impulsando a nivel europeo, nacional y andaluz. De esta forma, se transformarán en suelos fértiles que permitirán la corrección de la calidad de las aguas y la regeneración de espacios degradados por la actividad minera histórica.

Asimismo, destacan que la puesta en marcha del proyecto supondrá la oportunidad de situar a la Cuenca Minera onubense como un referente en sostenibilidad y economía circular, al integrar la valorización de residuos para que pasen a ser recursos valiosos para la actividad minera, permitiendo, de esta forma, cerrar el círculo y preservar la riqueza ambiental de la comarca.

Foto: Detalle de humedal reactivo para depurar aguas

¿Puede la valorización de los residuos mejorar la salud pública?

La Junta de Andalucía, a instancias de la legislación estatal y europea, ha llevado a cabo una regulación del tratamiento de estos lodos

Al hablar de los beneficios de la valorización de los residuos es bastante común incidir sobre los efectos positivos que tiene en ámbitos como el medio ambiente, la reducción de la contaminación, la economía, e incluso, en el empleo, por la generación de puestos de trabajo que lleva consigo esta actividad. Sin embargo, pocos conocen los beneficios y la aportación que hace en la salud y el bienestar de las personas.

La aplicación agrícola directa de lodos de depuradora, o desechos orgánicos de animales (estiercol) puede afectar a la calidad de las aguas causando afecciones para la salud por esta vía a transmitir la contaminación incluso a los cultivos.

Aunque estos problemas de salud, pueden considerarse poco relevantes en países desarrollados como España, donde el tratamiento de los residuos está controlado por una estricta normativa, es de sobra conocido el empleo sin control que en ocasiones se ha hecho de los residuos orgánicos.

Para evitar estas prácticas, la Junta de Andalucía, a instancias de la legislación estatal y europea, ha llevado a cabo una regulación del tratamiento de estos lodos, que obliga a su tratamiento previo y prohíbe la aplicación directa en agricultura.

La solución a este problema está vinculada a un cambio de paradigma en la gestión futura de los residuos que pasa por procurar una menor acumulación de los mismos en pro de su correcta valorización y uso como materias primas.

Las administraciones están apostando, actualmente, por nuevas plantas de tratamiento enfocadas a inertizar los residuos, eliminando cualquier posible riesgo para la salud.

Se trata de fomentar la implantación de los procesos biológicos y naturales que den una segunda vida a los residuos de una forma sostenible basada en la economía circular para fabricar fertilizantes y suelos que permitan una mejora del medioambiente y la sostenibilidad. Según los expertos en la materia, este es, sin duda, el futuro al que se avanza para seguir garantizado un mundo más habitable a las próximas generaciones.

La empresa GSS destaca el valor ambiental que tendrá su planta de tecnosuelos en Riotinto

La empresa muestra su voluntad de seguir manteniendo encuentros con las administraciones, entidades y colectivos sociales para trasladarles información real y veraz sobre el proyecto

La empresa GSS, Green Soil Solutions, impulsora de la planta de producción de tecnosuelos en el municipio de Minas de Riotinto, resalta la «solvencia ambiental» de este proyecto que tiene como objetivo principal «valorizar residuos y utilizarlos para la fabricación de suelos mediante técnicas de compostaje» que permitan restaurar espacios degradados por la minería histórica y corregir la acidez y la presencia de metales en las cuencas de los ríos Tinto y Odiel. Asimismo, insiste en la contribución de esta actividad a la salud de las personas, el empleo y el desarrollo económico del municipio de Minas de Riotinto y de toda la comarca.

La compañía muestra su voluntad de «seguir manteniendo encuentros y reuniones con las administraciones locales y provinciales, entidades y colectivos sociales que así lo requieran» para trasladarles información real y veraz sobre el proyecto y resolver dudas sobre sus aspectos técnicos. Del mismo modo, invita a instituciones y ciudadanos a sumarse a un diálogo constructivo y realizar las aportaciones que consideren oportunas para mejorar la propuesta presentada, con el objetivo de establecer una planta pionera en Andalucía y a la vanguardia en materia ambiental.

GSS señala que se ha trasladado «una imagen errónea del proyecto, generando una crispación social que pone en riesgo la oportunidad de generar empleo y riqueza de manera sostenible y situar a la Cuenca Minera de Riotinto como un referente europeo en materia de gestión medioambiental».

La planta de producción de tecnosuelos ha sido sometida a un «riguroso estudio de impacto ambiental» en el que se han tenido en cuenta todos los parámetros pertinentes para que su actividad «no afecte a la calidad de vida de los vecinos» de las localidades cercanas. Además, el proyecto está en fase de tramitación de una Autorización Ambiental Integrada, que es la autorización más restrictiva en este tipo de instalaciones, en la que se recoge cualquier potencial impacto ambiental y se establecen las medidas para neutralizarlos, asegurando un total cumplimiento de todos los requisitos legales que recoge la administración andaluza.

En lo que respecta a la potencial generación de olores provocados en el proceso productivo, la empresa ha llevado a cabo un estudio exhaustivo para elegir el emplazamiento siguiendo los criterios de lejanía con las poblaciones cercanas. El diseño de la planta contempla que todo el proceso se realice confinado en naves diseñadas específicamente para ello. Además, incluye sistemas de control y monitorización de potenciales olores, así como de vientos dominantes en la zona. Todo ello, ha sido analizado y verificado por expertos independientes que confirman la nula incidencia en los núcleos de población cercanos.

La empresa insiste en que, en ningún caso, debe evaluarse el proyecto sin conocer y contrastar la información sobre el mismo, puesto que este tipo de acciones pueden generar alarma social y desconfianza sobre una actuación que parte del cumplimiento de la normativa y de la premisa de mejorar la calidad de vida de los municipios y los ciudadanos de la comarca.

La planta de producción de tecnosuelos de Riotinto está basada en un modelo de economía circular que apuesta por la valorización de los residuos para transformarlos en recursos que permitan la fabricación de suelos diseñados específicamente para la regeneración de zonas degradadas. Responde, por tanto, a las políticas ambientales que la Unión Europea, el Gobierno de España y la Junta de Andalucía, están proyectando para el futuro en materia de sostenibilidad y que apuesta por la valorización frente a otros tratamientos.

La planta de Riotinto debe ser considerada como una iniciativa pionera, que sienta las bases del futuro y permita a las administraciones cumplir con sus objetivos y con la legislación ambiental y minera, una de las más restrictivas a nivel mundial.

Por último, GSS resalta que la puesta en marcha de este proyecto supone la oportunidad de convertir a Minas de Riotinto en un ejemplo y un referente mundial en la gestión ambiental y la economía circular.