El expresidente de la Sociedad Española de Farmacia Rural fallece a los 46 años

Berrocal está de luto por la muerte de uno de sus vecinos más queridos, el farmacéutico Francisco Javier Guerrero, que falleció al pasado sábado a los 46 años tras sufrir una devastadora enfermedad que ha acabado con su vida en dos años.

Pese a que sólo llevaba una década en el municipio, donde su mujer regenta la farmacia de la localidad, Guerrero, que fue presidente de la Sociedad Española de Farmacia Rural (Sefar), se ganó pronto el cariño de los vecinos y vecinas de Berrocal, donde nació su hijo.

De hecho, Francisco Javier Guerrero, que regentaba la farmacia del vecino municipio sevillano de El Madroño, ha dedicado buena parte de su vida a luchar por la mejora de las farmacias rurales como servicio público de primer orden, lo que el pasado mes de junio le hizo merecedor del premio a la Mejor Labor Profesional, concedido por la Fundación Avenzoar y el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla.

Nada más conocerse su fallecimiento, desde la Sociedad Española de Farmacia Rural han calificado a Guerrero como “el mejor defensor que ha podido tener la pequeña farmacia rural española”, al tiempo que han resaltado la importancia de su labor a la hora de acercar a la población información sanitaria de calidad.

Persona solidaria desde su juventud, durante su etapa universitaria participó en labores de cooperación mediante la organización y desarrollo de campos de trabajo con niños huérfanos y abandonados en un anexo del Hospital Civil de Tetuán (Marruecos).

Durante el emotivo acto en el que le concedieron el antes referido distintivo, Guerrero hizo un alegato en defensa de la farmacia como servicio público del medio rural que puede apreciarse a través de este enlace.