Juanma Moreno alude al rechazo de Vox a los presupuestos de 2022 como principal acicate

El Presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno (PP-A), ha decidido adelantar las elecciones autonómicas al próximo domingo 19 de junio sin romper el gobierno de coalición que mantiene con Ciudadanos (Cs) desde el inicio de legislatura, a diferencia de lo ocurrido en Madrid y Castilla y León donde los ‘populares’ Isabel Díaz Ayuso y Alfonso Fernández Mañueco cesaron a los consejeros de la formación naranja al disolver sus respectivos parlamentos para celebrar comicios anticipados.

Lo ha hecho después de convocar en la tarde de este lunes una reunión extraordinaria del Consejo de Gobierno. A las 20,30 horas, el presidente de la Junta ha comparecido públicamente para informar de su decisión de convocar elecciones el 19 de junio. El plazo legal para convocarlas en esa fecha termina precisamente este lunes.

Previamente al Consejo de Gobierno, Moreno ha convocado al vicepresidente de la Junta de Andalucía y líder regional de Ciudadanos (Cs), Juan Marín, a una reunión en el Palacio de San Telmo, a las 18,00 horas, para comunicarle la fecha de las elecciones, como se ha comprometido públicamente en los últimos días.

Al optar por el domingo 19 de junio, Moreno ha firmado este mismo lunes el decreto de disolución del Parlamento y de convocatoria de elecciones, que deberá publicarse este martes 26 de abril en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), de acuerdo con los plazos marcados en la Ley Electoral de Andalucía.

El decreto de convocatoria no se limita a fijar el día de la votación, sino que también establece la fecha de inicio de la campaña electoral, que se prolongará durante 15 días, y la fecha de la sesión constitutiva del Parlamento, que tendrá lugar “dentro de los 25 días siguientes al de la celebración de las elecciones”, según el artículo 14 de la Ley Electoral de Andalucía.

De este modo, la cita con las urnas del 19 de junio implica que la campaña electoral se iniciaría a las 00,00 horas del viernes 3 de junio y la sesión constitutiva del Parlamento andaluz tendría como fecha tope el 14 de julio.

Asimismo, la convocatoria electoral para el 19 de junio implica no convocar más plenos del Parlamento, ya que la disolución de la Cámara sería efectiva este martes 26 de abril y la próxima sesión está fijada por la Mesa para los días 27 y 28 ya no podría celebrarse.

Precisamente el orden del día de dicho pleno incluía el debate y aprobación del dictamen de la comisión de investigación sobre la extinta Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe), que señala la responsabilidad política de los expresidentes socialistas Manuel Chaves, José Antonio Griñán y Susana Díaz y que no vería la luz de forma oficial si no es aprobado por el Parlamento.

Además decaerían proyectos de Ley como el de Economía Circular, que acaba de aprobar su dictamen en comisión con el único rechazo de Vox; de Policías Locales, que superó el debate de totalidad esta misma semana; y la polémica proposición de Ley para la ordenación de los regadíos del Condado de Huelva que tanto debate ha generado en relación con el futuro de Doñana.

El anuncio oficial del adelanto electoral se producirá tres semanas después de que el propio presidente plantease expresamente esa posibilidad ante la necesidad de contar con nuevos presupuestos para afrontar el actual escenario económico con la subida de la inflación y la incertidumbre por la guerra de Ucrania, ya que están prorrogados desde 2021 tras el rechazo de Vox, PSOE-A, Unidas Podemos y Adelante Andalucía el pasado mes de noviembre a las cuentas presentadas por el Gobierno de PP y Ciudadanos (Cs) para 2022.

Esta será la cuarta ocasión en la que se adelanten comicios en Andalucía. La primera fue en el año 1996, cuando el socialista Manuel Chaves decidió adelantarlas dos años tras la denominada legislatura de la ‘pinza’ PP-IU. Posteriormente la socialista Susana Díaz optó por el anticipo electoral en dos ocasiones, en 2015 poniendo fin al gobierno de coalición con IU con un año de antelación y en 2018 adelantando los comicios en casi cuatro meses tras la ruptura de su pacto de legislatura con Cs.

TRAS TRES AÑOS Y MEDIO DE LEGISLATURA

De este modo, la XI Legislatura andaluza tendrá una duración de tres años y medio, ya que arrancó el 27 de diciembre de 2018 con la constitución del Parlamento andaluz, conformado por cinco grupos parlamentarios, tras los comicios que se desarrollaron el 2 de diciembre de ese año y que dieron paso al primer gobierno sin presencia del PSOE en la historia autonómica. En dichas elecciones, el PSOE-A obtuvo 33 escaños; el PP-A, 26; Ciudadanos (Cs), 21; Adelante Andalucía (marca con que concurrieron Podemos e IULV-CA), 17; y Vox, 12 diputados.

Aunque el PSOE-A volvió a ser el partido más votado, no logró revalidar al frente del Gobierno de la Junta, por primera vez en la historia de la autonomía andaluza, merced al pacto de gobierno alcanzado entre PP-A y Cs y al acuerdo que Vox suscribió con los ‘populares’ para apoyar la investidura de su candidato, Juanma Moreno, como nuevo presidente de la Junta, que logró así mayoría absoluta en la primera votación el 16 de enero de 2019.

Moreno definió cinco días después el gobierno de coalición de PP y Cs con once consejerías, seis manos del PP y cinco de la formación naranja, en la primera legislatura de la historia de la autonomía andaluza en la que el PSOE-A ha ejercido la oposición al gobierno.

El Ejecutivo de PP y Cs ha desarrollado su labor de gobierno con estabilidad y evitando las disputas públicas, lejos de las diferencias explicitadas en otras comunidades como Madrid o Castilla y León, y logró aprobar sus tres primeros presupuestos –de los años 2019, 2020 y 2021– con el apoyo de Vox tras negociaciones que se alargaron in extremis en el Parlamento.

EL RECHAZO AL PRESUPUESTO DE 2022, PUNTO DE INFLEXIÓN

Sin embargo, el rechazo a las cuentas del año 2022 el pasado mes de noviembre al sumarse el rechazo de Vox al voto contrario de PSOE-A, Unidas Podemos y Adelante Andalucía supuso el punto de inflexión de la legislatura, ya que supuso el distanciamiento definitivo de la formación que lidera Santiago Abascal del Gobierno de PP y Cs, que quedaba de este modo en minoría parlamentaria.

Tras varios meses en que pese a todo el Ejecutivo andaluz siguió sacando adelante sus principales iniciativas en el Parlamento, Moreno empezó a defender a principios de abril la posibilidad de no agotar ese ciclo de cuatro años y convocar elecciones para su celebración antes del verano, el próximo mes de junio, con el argumento de que no sería más que un adelanto “técnico” porque tras las vacaciones debería disolver la Cámara en cualquier caso.

La justificación que ha esgrimido el también presidente del PP-A para explicar ese posible adelanto electoral es la opción que esa cita con las urnas abriría para conformar un nuevo gobierno en verano que pudiera aprobar un nuevo Presupuesto autonómico este mismo año, que sustituyera al prorrogado de 2021, que es con el que funciona actualmente la Junta de Andalucía, y que permitiera afrontar mejor el actual escenario económico, complicado por la espiral inflacionista y las consecuencias de la guerra en Ucrania.

Durante toda la legislatura el Gobierno de PP-A y Cs ha presumido de haber conseguido “encapsular” las diferencias que han ido surgiendo entre ambos partidos a nivel nacional y evitar que pudieran contaminar la labor del Ejecutivo de coalición.

De hecho, Moreno ha mostrado a lo largo de todo el mandato gran sintonía política y personal con el vicepresidente de la Junta y líder de Cs en Andalucía, Juan Marín, quien llegó a participar como ponente en el Congreso Regional del PP-A que reeligió a Moreno y a su vez ha invitado al presidente de la Junta a participar en el pistoletazo de salida de la precampaña electoral de Cs el 14 de mayo en Córdoba.

Los mayores distanciamientos públicos entre Moreno y Marín se han producido precisamente durante las últimas semanas al hilo del adelanto electoral, que el presidente del PP ha defendido para permitir conformar un nuevo gobierno en verano que pudiera aprobar un nuevo presupuesto autonómico este mismo año, mientras que el líder de Cs lo ha rechazado por injustificado más allá del interés partidista.