El comité de coordinación del partido en la comarca acuerda su rechazo por unanimidad

El comité de coordinación del Partido Popular de la Cuenca Minera, reunido el pasado martes en Zalamea la Real, ha acordado, por unanimidad de todos sus miembros, el rechazo al proyecto de la planta de tecnosuelos que la compañía minera Atalaya Mining pretende construir en Minas de Riotinto para la “regeneración los terrenos afectados por la minería histórica”, que actualmente siguen generando contaminación de las aguas de la cuenca del Odiel.

Los populares de la comarca argumentan que esta zona “no puede ser utilizada continuamente como receptor de residuos”, por lo que muestran su “rechazo absoluto a estas nuevas instalaciones” que a su juicio “comprometen el mañana de la comarca onubense y de las futuras generaciones”.

Desde el PP apuntan a la responsabilidad del Ayuntamiento de Minas de Riotinto, ya que aseguran que el proyecto “comenzó su tramitación sin oposición por parte de la alcaldesa” de la localidad, la socialista Rocío Díaz. En base a ello, los populares denuncian que por un lado la regidora “acuerda con la empresa la instalación en su término municipal de estas instalaciones y, por otro lado, ante la opinión pública, pretende hacer creer que está en contra de la misma”.

“Este proyecto únicamente se puede paralizar por parte del Ayuntamiento de Minas de Riotinto, en primera instancia presentando un informe negativo de compatibilidad urbanística o en última instancia negando a la empresa las licencias de obras y de actividad”, prosiguen desde el PP.

El comité de coordinación en la Cuenca Minera, integrado por concejales de Nerva, Riotinto, El Campillo, Zalamea, Berrocal, Campofrío y Valverde, ha mostrado su “inquietud por el impacto ambiental, sobre la salud de los vecinos y en la calidad de vida de la comarca que podría provocar dicho proyecto”, apostillan.

Por último, los populares han señalado que la Cuenca Minera es “un territorio muy castigado por las políticas históricamente equivocadas del PSOE en la Junta de Andalucía y de aquellos alcaldes socialistas que tomaron malas decisiones cuando debería haber estado velando por el bienestar de los municipios”, por lo que “no podemos caer en los mismos errores que nos han llevado a la situación actual”, añaden.

Freno judicial

El posicionamiento público del Partido Popular de la Cuenca Minera se produce unos días después de conocerse que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo ha suspendido el trámite de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) concedida por la Junta de Andalucía a la futura planta de tecnosuelos de Riotinto, tal y como comunicaron desde el PSOE de Huelva, que calificó la decisión judicial como una “buena noticia” que deja patente que el trabajo realizado por los alcaldes y alcaldesas socialistas de la comarca “empieza a dar sus frutos”.

“Atendiendo al clamor ciudadano”, los socialistas han trabajado “al unísono para evitar que se haga más daño al territorio y a la población con proyectos que, lejos de generar riqueza y empleo, empobrecen a la comarca”, señalaron, al tiempo que reafirmaron su compromiso con que la planta no se instale en la zona y criticaron que “el Gobierno de Moreno Bonilla no tuvo en cuenta a los vecinos y vecinas de la Cuenca Minera” al conceder la AAI.

En esta línea, la alcaldesa de Minas de Riotinto, Rocío Díaz, en nombre de los ediles socialistas, calificó este pronunciamiento del Juzgado como “una buena noticia que deja patente que el trabajo del Ayuntamiento de Riotinto, así como el de El Campillo, Zalamea, Campofrío y la Granada de Riotinto, ha dado sus frutos”.

Asimismo, la alcaldesa señaló que “no hay ninguna autorización por ninguna parte”, pues “la compatibilidad urbanística no la da el Ayuntamiento de Riotinto. Ni la alcaldesa ni los técnicos del Ayuntamiento deciden lo que es compatible o no. Por lo tanto, no hay nada que el Ayuntamiento de Riotinto ni los de la comarca le hayan dado a esta planta”, añadió.

Suelos fértiles para la regeneración ambiental

La decisión judicial se produjo unas semanas después de que Atalaya Mining, empresa operadora en la mina de Riotinto, diese a conocer esta una nueva iniciativa dentro de su “estrategia de diversificación” de la Cuenca Minera: la puesta en marcha de una “industria de producción de suelos fértiles” que supone una inversión de siete millones de euros y la creación de 50 empleos directos, al tiempo que incluye la “última tecnología y soluciones innovadoras”.

La nueva fábrica producirá tierras diseñadas “a la carta” para regenerar los terrenos afectados por la minería histórica, corrigiendo factores como la acidez, ya que actualmente estos siguen generando contaminación de las aguas de la cuenca del Odiel, impidiendo su aprovechamiento para consumo y regadío. Además, las tierras producidas contribuirán a la restauración de las instalaciones mineras actuales, según obliga la autorización ambiental de la mina, cuyo cumplimiento es imprescindible para la continuidad de las operaciones, añadieron desde la compañía.

Esta iniciativa forma parte del proyecto ‘Horizonte 2035’, una visión estratégica que impulsa Atalaya Mining para el futuro de la comarca y que tiene como objetivo crear tejido industrial y empresarial paralelo a la actividad de la mina. La estrategia se desarrolla en base a cinco pilares: minería y metalurgia, economía circular, energía, turismo y formación, según han informado desde la propia compañía.

La nueva fábrica se encuadra en la rama de Economía Circular, pues utiliza como materia prima la mezcla de algunos subproductos como rocas de mina, cenizas de biomasa, materia orgánica y restos de podas. La empresa tendrá un registro público de los materiales que adquiera como materia prima y que “no suponen ningún riesgo para la salud y mejoran los suelos existentes”, para lo que contará con el asesoramiento de la Universidad de Huelva gracias al convenio suscrito con el departamento de Ciencias de la Tierra, cuyos técnicos identificarán los materiales aptos para la regeneración de Riotinto.

Las nuevas tierras producidas se aplicarán sobre terrenos actualmente afectados, generando una capa de suelo que permita el crecimiento de especies vegetales autóctonas, la vuelta de la fauna y la mejora de la calidad de las aguas, corrigiendo su acidez hasta parámetros naturales. El proceso ha demostrado su “validez e inocuidad” gracias a las pruebas que se han realizado en las instalaciones de Atalaya, donde se ha restaurado una hectárea de terreno con “resultados excelentes”, informa la compañía.

“Estamos orgullosos de contribuir al desarrollo de la provincia de Huelva trabajando por la recuperación de la cuenca del Río Odiel, afectada por la minería en una época en que no había regulación ni conciencia ambiental. El producto de la nueva instalación va a permitir además la continuidad de nuestras operaciones, pues garantiza que los terrenos que afectamos hoy van a quedar perfectamente restaurados cumpliendo con las exigencias que nos marca la ley”, destacaba Enrique Delgado, director general de Atalaya Riotinto.

Además, Delgado señaló que “queremos mirar de frente a un horizonte en el que Cerro Colorado, la mina que alimenta nuestra producción, empiece a declinar. Trabajamos en varias líneas para que la Cuenca Minera siga desarrollándose, manteniendo su calidad de vida y la capacidad de ofrecer un proyecto vital a su gente”, ha agregado. En la actualidad, Atalaya genera un total de 2.355 empleos (directo, indirecto e inducido), equivalente al 1.2% del empleo de la provincia de Huelva, según el estudio socioeconómico elaborado por Sintering (Universidad de Huelva).