Zalamea la Real vivió este fin de semana por todo lo alto su Carnaval, pero no todo fue alegría y diversión durante las carnestolendas zalameñas. Mientras la gran mayoría de zalameños y zalameñas disfrutaba con absoluta normalidad de las fiestas, que se celebraron en la carpa situada en la Plaza de la Constitución, hubo quien o quienes optaron por entretenerse destrozando los urinarios públicos, como se aprecia en la imagen que ilustra esta información.
Los hechos han sido dados a conocer y lamentados por el alcalde del municipio, Marcos Toti, para quien «desgraciadamente siempre hay algún energúmeno que no respeta lo que es de todas y todos», destaca el primer edil, al tiempo que subraya que, al margen de este hecho, «Zalamea vivió el Carnaval de forma divertida y sin problemas».
El regidor zalameño tiene claras cuales son las mejores fórmulas para combatir este tipo de actos: la educación, el respeto y la colaboración ciudadana. «Sinceramente pienso que la única solución para que no sucedan estas cosas es la educación, el respeto por lo público y el que el resto de la sociedad no miremos para otro lado cuando veamos que alguien hace un destrozo de este tipo», señala Toti.