El Ayuntamiento destinará a esta causa solidaria los tapones de plástico entregados por los vecinos y vecinas del municipio

El Ayuntamiento de Campofrío ha decidido destinar a un nuevo fin solidario los numerosos tapones de plástico que los vecinos de la localidad llevaban bastante tiempo reciclando para, en un principio, conseguir fondos para la restauración de la Iglesia de San Miguel.

Una vez lograda la financiación para acometer esa actuación, el Consistorio campofrieño dedicará los tapones recogidos a ayudar a Gonzalo, un niño sevillano de 10 años que sufre parálisis cerebral y que necesita reunir 150.000 kilogramos de tapones de plástico al año para costear el tratamiento que requiere.

Desde el Ayuntamiento han animado a los vecinos y vecinas de la localidad a seguir reciclando tapones para continuar ayudando a Gonzalo, al tiempo que ha informado de que son válidos tapones de plástico duro de botellas de agua, zumo, tetra briks, botes de salsa, aceite, lejía, suavizante, champú, gel de baño, colonia, detergente, bombonas de butano, pasta de dientes, etc.

El tratamiento que necesita Gonzalo, según han añadido desde el Consistorio campofrieño, va desde la fisioterapia hasta la logopedia, nutrición, estimulación sensorial o terapia ocupacional.