Las dos partes firman el nuevo convenio colectivo tras cuatro meses de negociación

Atalaya Riotinto Minera y su Comité de Empresa han firmado hoy la renovación para los próximos cinco años de su convenio colectivo, un nuevo acuerdo social que incluye una serie de mejoras entre las que destaca la subida «significativa» de los salarios, del 6,5 por ciento en el primer año.

Así lo han comunicado desde la propia compañía que opera la mina de Riotinto, que ha calificado esta medida como «especialmente importante en el escenario de alta inflación que sufre la economía y que está haciendo mella en el poder adquisitivo de la plantilla».

Así, empresa y trabajadores han acordado una subida mínima del 18,5 por ciento de los salarios a lo largo de la vigencia del nuevo convenio. Adicionalmente, junto a esta subida salarial, se ha acordado el establecimiento de una cláusula de revisión salarial condicionada a la evolución del IPC en cada uno de los años.

A estas subidas salariales se suman una serie de beneficios a disposición de la plantilla, encaminados a mejorar la conciliación y otros aspectos de la vida laboral de las personas que tienen su puesto de trabajo en Riotinto. La aplicación de estas mejoras en el convenio será inmediata y tendrá validez para los próximos cinco años.

El acuerdo ha sido refrendado por la plantilla de Atalaya y en su negociación han participado la dirección de la empresa y la representación de los trabajadores a través del Comité de Empresa y las representaciones sindicales de USO, que ostenta la mayoría de la representación, y UGT.

Desde la empresa han destacado el «esfuerzo de ambas partes para alcanzar un acuerdo que aportará estabilidad y mejores condiciones laborales», ha subrayado la compañía tras la firma del convenio, que se ha cerrado tras cuatro meses de trabajo de la mesa negociadora, «un tiempo considerablemente corto», y bajo un «clima de consenso y buena fe por ambas partes, algo que tanto empresa como representantes de la plantilla han agradecido en el acto de firma».

La intención de todas las partes era blindar el poder adquisitivo de la plantilla y, a su vez, otorgar estabilidad social a la operación minera de Riotinto y a la empresa operadora, inmersa en un plan de crecimiento.

Atalaya Mining considera que «su fuerza reside en las personas que la conforman». Por ello «se esfuerza en crear un entorno de trabajo igualitario, estimulante y de calidad en los aspectos humano, social, ambiental, organizativo y económico», añaden desde la empresa, que cuenta en la actualidad con más de 470 empleados, de los que un 68 por ciento proceden de municipios de la Cuenca Minera, según los datos facilitados por la compañía.

Asimismo, la plantilla de Atalaya cuenta con alrededor de un 90 por ciento de empleados indefinidos, mientras que el nivel salarial de los puestos menos cualificados supera en un 84 por ciento el actual salario mínimo interprofesional (SMI).

Sobre Atalaya

Atalaya Riotinto Minera, filial de Atalaya Mining, es la operadora de la histórica mina de Riotinto, un proyecto minero que «incorpora las últimas innovaciones tecnológicas en el sector, así como los conceptos de seguridad y sostenibilidad ambiental propios de la minería del siglo XXI».

Riotinto es hoy una mina de cobre a cielo abierto que ha producido más de 56.000 toneladas de cobre en concentrado en 2021. Cuenta con 197 millones de toneladas de reservas de mineral de cobre y trabaja constantemente en la identificación de nuevos recursos para seguir alargando la vida de la explotación, que actualmente se sitúa en 11 años.

La puesta en marcha del Proyecto Riotinto ha supuesto una «gran inversión industrial, incluyendo importantísimas mejoras ambientales y la creación de más de 1.100 empleos directos e indirectos».