El escritor nervense es enterrado en La Granada de Riotinto tras recibir el responso en su localidad natal

El nervense Antonio Perejil Delay ha sido enterrado este viernes en el cementerio de La Granada de Riotinto, a donde han acudido numerosos nervenses y amigos del escritor para darle su último adiós tras el trágico suceso que se produjo el pasado miércoles en su domicilio de Sevilla, donde Perejil Delay fue asesinado presuntamente por su hijo de al menos una cuchillada en el pecho.

El responso previo al entierro ha tenido lugar a las 16.00 horas en Nerva, su localidad natal, a donde fue trasladado el cuerpo del escritor desde el tanatorio de Minas de Riotinto, donde Perejil Delay ha sido velado desde este jueves.

El fallecimiento del escritor tuvo lugar su domicilio de Sevilla, situado en la calle Niña de la Alfalfa, sobre las seis de la tarde, cuando el 091 recibió una llamada alertando de lo ocurrido, tras lo que, unas horas después, el presunto autor del crimen fue detenido por la Policía Nacional en la avenida de San Lázaro, a unos 200 metros del lugar del suceso.

A la vivienda de Antonio Perejil Delay, que este jueves cumplía 66 años, se desplazaron varios patrulleros de la Policía, los Zetas, y una ambulancia del 061, tras lo que los médicos solo pudieron certificar la defunción.

El presunto parricida, de 28 años, se encontraba en paradero desconocido tras marcharse del piso y tenía problemas con las drogas, además de once detenciones anteriores, motivo por el que sus padres habían intentando ingresarlo, sin éxito, en varios centros.

El Ayuntamiento de Nerva decretó un día de luto oficial por la trágica muerte del escritor nervense y mostró su más enérgica repulsa por el suceso, al tiempo que trasladó su más hondo pesar a la viuda, familiares y amigos más cercanos de la víctima.

Tal y como adelantaron desde Onda Minera RTV Nerva, el alcalde de la localidad, José Antonio Ayala, destacó el amor que Antonio sentía por Nerva y su disposición a colaborar en cuantos actos culturales se demandaba su presencia.

“El mundo de la cultura nervense lo va a echar mucho de menos. Siempre estaba dispuesto a colaborar con cualquier acto cultural con sus poemas, sus canciones, su literatura. Era todo ímpeto y corazón. Y con esto es con lo que hemos de quedarnos”, subrayó, en declaraciones recogidas por la citada radio y televisión municipal nervense.

Foto: Manuel Aragón