Considera finalizadas todas las diligencias cuya práctica quería preservar y que “existen contundentes indicios de criminalidad” en el detenido

La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Valverde del Camino, que investiga el asesinato de la joven Laura Luelmo en El Campillo, ha levantado este viernes, a través de un auto, el secreto de las actuaciones que había decretado el pasado día 17 de diciembre.

En dicho auto, la jueza señala que toma esta decisión una vez practicadas todas aquellas diligencias “que se han ido suscitando” tras el hallazgo del cuerpo sin vida de la profesora zamorana y tras haber sido detenida una persona sobre la que, indica, “existen contundentes indicios de criminalidad en relación a la perpetración de los hechos”.

Así, indica que “la inminente declaración judicial del detenido por los hechos -que comenzó pasadas las 19.50 horas de este viernes-, junto a que se han practicado aquellas diligencias cuya práctica se quería preservar a fin de no perjudicar la investigación, conducen a acodar el cese del secreto de las actuaciones al haber desaparecido el fin que lo motivó”, concluye.

El detenido por la muerte de Laura Luelmo, Bernardo Montoya, inició su comparecencia ante el juzgado que instruye el caso pasadas las 19.50 horas de este viernes, cuando el autor confeso del crimen cometido en El Campillo fue increpado por numerosos vecinos.

La comparecencia se inició por tanto casi 11 horas después de que Montoya saliese de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, tras lo que, según explicaron desde la Benemérita, permaneció en las dependencias del cuartel de Valverde del Camino, donde ya estaba a disposición judicial pero a la espera de comparecer ante la magistrada del juzgado, Elvira Mora.

Esta mañana llegaba a la sede judicial andevaleña la abogada de la acusación particular, Patricia Catalina, quien anunciaba, tal y como ya informó Tinto Noticias -el periódico de la Cuenca Minera de Riotinto-, que solicitará la prisión permanente revisable para el asesino confeso de la joven zamorana de 26 años.

No obstante, hasta que no se levante el secreto del sumario, decretado, en un auto del pasado 17 de diciembre, por la magistrada que instruye el caso, no podrá presentarse la acusación formal. “En cuanto levante el secreto de sumario podremos estudiarlo con la Fiscalía y presentar nuestra acusación formal”, indicó la abogada.

Bernardo Montoya, que había llegado recientemente al municipio campillero tras cumplir condena por asesinato, fue detenido este pasado martes en Cortegana después de que efectivos de la Unidad Central Operativa (UCO) inspeccionaran su vivienda de la calle Córdoba de El Campillo, situada en frente de la casa donde residía Laura, que había llegado al municipio sólo unos días antes de su desaparición tras incorporarse, el pasado 4 de diciembre, como profesora del Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Vázquez Díaz de Nerva.

Un día después de su detención, este mismo miércoles, Montoya confesó este que es el autor del crimen de la joven, a quien, según su declaración, intentó violar, golpeó y dejó malherida en el campo el mismo día de su desaparición, esto es, dos o tres días antes de la fecha en que la autopsia fija la muerte de la joven, que desapareció el miércoles 12 de diciembre en El Campillo y fue hallada muerta este lunes con signos de violencia y semidesnuda a unos cuatro kilómetros de la localidad, en la margen izquierda de la carretera nacional 435.

No obstante, la autopsia realizada al cuerpo de Laura no sólo reveló que la joven zamorana de 26 años falleció por un golpe en la frente entre dos y tres días después de su desaparición, tal y como ya informó Tinto Noticias, sino también que sufrió una agresión sexual, tal y como confirmaron fuentes de la investigación.