El méxicano Raúl Ramón ha presentado en Huelva su ópera prima dentro de la Sección Oficial Fuera de Concurso
El mexicano Raúl Ramón ha presentado este sábado en Huelva su ópera prima, ‘El Poderoso Victoria’, que forma parte de la programación del Festival de Cine de Huelva dentro de la Sección Oficial de Largometrajes fuera de concurso. Se trata de una superproducción de época que muestra la elección de un pueblo mexicano entre resistir o renunciar.
Según ha explicado Ramón durante su participación en el espacio ‘Encuentros’ la historia “plantea que nada es imposible y que hay que luchar contra lo imposible”. La especie humanana, ha reconocido el realizador, “es nómada” y es común “estar buscando cuál es nuestro lugar de forma permamente.
Hacer realidad ‘El Poderoso Victoria’, un proyecto que Ramón ideó hace diez años, no ha sido fácil pero el proceso fue “hermosísimo”. El director ha reconocido que se trata de una película “cara” y “coral”, que ha logrado reunir a un elenco lleno de “talentazos”. “Siempre he pensado que el trabajo del director es crear un universo atractivo para que la gente quiera entrar y no se quiera salir”, ha confesado.
Además de contar la historia, Ramón ha utilizado la película para mostrar México. “La fortaleza de una producción tienes que ponerla frente a la cámara, teníamos que sacar lo mejor de México: el sol, el desierto, la paleta de colores, el desierto de Durango, Jalisco, los trenes de vapor…” ha indicado.
El esfuerzo ha dado sus frutos y, tras su exitoso paso por varios festivales, ‘El Poderoso Victoria’ tendrá el mayor estreno posible en México, proyectándose en un millar de salas. “Quería una película profundamente mexicana pero universal, que no hubiera dudas de dónde está hecha pero tuviera esos valores universales del cine”, ha concluido Ramón.
El bagaje de ‘El Poderoso Victoria’
La película llega al Festival de Huelva tras conquistar a los espectadores en escenarios como el Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG), Chicago Latino Film Festival 2022 o San Diego Film Festival, en los que ha obtenido el Premio del Público. La película también ha permitido a Raúl Ramón obtener el Premio al Mejor Director en el festival de Ferrara.
La cinta está ambientada en 1936, año en el que el pueblo La Esperanza, en el desierto mexicano, recibe la noticia del cierre de la mina, su principal motor económico, y con esto la cancelación de la ruta del ferrocarril. Durán, el joven mecánico, ve frustrado su sueño de convertirse en maquinista y tendrá que elegir entre cruzar la frontera Norte y renunciar a sus raíces y al amor de su vida, o ayudar a un grupo de pobladores que resisten en el pueblo con el plan más descabellado: construir un tren.