Miembros de la Asociación ‘Onubenses unidos por una sanidad pública de calidad’ (Onusap) aseguran que fueron víctimas de una coacción para silenciar sus reivindicaciones en materia de sanidad
La Asociación ‘Onubenses unidos por una sanidad pública de calidad’ (Onusap) ha denunciado que el pasado domingo, durante el Comité Ejecutivo Autonómico que el PP de Andalucía celebraba en Huelva, que contó con la presencia del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, miembros de esta organización sufrieron «coacciones» por parte del PP y «amenazas» de agentes de la Policía Autonómica cuando se encontraban en las inmediaciones del acto, concretamente en el Parque de Zafra.
Desde Onusap explican que estos compañeros estaban reunidos de forma «pacífica» en la zona, donde portaban pancartas en las que denunciaban las «notables carencias que sufrimos en materia de sanidad», tras lo que, añaden, agentes de la Policía Autonómica se acercaron a ellos y no solo les exigieron que se colocaran detrás de las rejas del parque, sino que incluso amenazaron a una compañera con denunciarla por desacato y desobediencia, «cosa totalmente incierta, porque en ningún momento se desobedecieron sus órdenes», aseguran.
Para Onusap, lo ocurrido el pasado domingo fue «un grave ejercicio de coacción» para callarles, han subrayado, al tiempo que han anunciado que tomarán «las medidas oportunas para que no se repitan estos hechos. Pretenden coaccionarnos y no lo van a conseguir», concluyen a través del siguiente comunicado en el que cuentan su versión de lo ocurrido y que titulan con el nombre de ‘Nos mandan detrás de las rejas para intentar silenciarnos’.
Tras conocer la noticia de que el presidente de la Junta de Andalucía venía a Huelva a reunirse con los representantes de su partido en nuestra provincia, algunos miembros de ONUSAP decidieron acudir a las Cocheras del Puerto para reivindicar ante dichos políticos las notables carencias que sufrimos en materia de sanidad, tal como venimos haciendo hace tiempo desde nuestra asociación. Así, se reunieron en el parque de Zafra un grupo de unas ocho o diez personas, de manera pacífica y portando pancartas donde reclamaban el Materno-Infantil, el CHARE de Lepe y una sanidad pública digna para Huelva.
Al parecer, alguien del PP dio la orden de que se echara del parque, que es un parque público, a las personas que estaban allí reunidas. Efectivamente, aparecieron unos policías autonómicos y uno de ellos exigió a nuestros compañeros que se situaran tras las rejas del parque y que desde el exterior gritaran sus proclamas, situándose entonces donde se les indicó, a pesar de la dudosa legalidad de las órdenes recibidas. Asimismo, se les pidió la documentación y una de nuestras compañeras fue amenazada por el mencionado policía autonómico, de manera prepotente y chulesca, con una denuncia, ya que, según él, estaba cometiendo un delito de desacato y
desobediencia, cosa totalmente incierta, porque en ningún momento se desobedecieron sus órdenes ni, por supuesto, se insultó ni se intentó hacer nada contra los políticos reunidos. Es más, una vez fuera del recinto, también intentaron que se marcharan de allí.Fue entonces, cuando, con los ánimos de los presentes ya caldeados, salieron varios miembros del PP, entre los que figuraban la Sra. delegada de Salud, Manuela Caro, la delegada del Gobierno de la Junta, Bella Verano y el exalcalde de Ayamonte a dialogar (o eso dicen), con quienes estaban allí, aunque en realidad lo único que pretendían era colocar el típico discurso preparado de otras veces, recitando los consabidos mantras de la “herencia recibida” y lo bien que lo están haciendo ellos. Evidentemente, la conversación no llegó a ninguna parte debido a la tensión del momento, ya que quienes estuvieron allí se sintieron humillados al ser tratados
como delincuentes por quienes dicen ser nuestros representantes, que, en el colmo de la desfachatez, negaron haber enviado a la Policía.En resumen, todo este desagradable episodio constituyó, en nuestra opinión, un grave ejercicio de coacción hacia quienes sólo pedían ser oídos por nuestros representantes políticos, que son los responsables de solucionar los graves problemas que tenemos.
Desde ONUSAP queremos denunciar públicamente nuestra indignación por el trato recibido y manifestar que seguiremos denunciando la pésima situación de la sanidad onubense. No vamos a permitir que se trate así a ninguna persona que quiera manifestar su opinión libre y pacíficamente y tomaremos las medidas oportunas para que no se repitan estos hechos.
Pretenden coaccionarnos y no lo van a conseguir. Huelva necesita urgentemente que se salde la deuda histórica que tienen con ella y que pasa por un Materno- Infantil, los Chares prometidos, una Primaria de Calidad, el Delta de Valverde y tantas y tantas cosas de las que carecemos.
Seguiremos gritándolo a los cuatro vientos hasta que atiendan nuestras demandas, gobierne quien gobierne, que les quede muy claro.
NO NOS VAN A CALLAR.
Onusap