Eva María Vélez Pichardo la atendió durante los 50 minutos que tardó en llegar el equipo médico en una playa que carece de servicio de urgencias a partir de las 20.00 horas
Una mujer salvó su vida en la madrugada de este pasado domingo en la playa de La Antilla (Lepe) gracias a la colaboración ciudadana, o mejor dicho, gracias a la colaboración de una ciudadana, concretamente de una mujer de Zalamea la Real, municipio de la comarca objeto principal de TINTO NOTICIAS -El periódico de la Cuenca Minera de Riotinto-.
Su nombre es Eva María Vélez Pichardo y es maestra y directora del colegio público de Berrocal. Eva María, que se encuentra estos días veraneando en La Antilla, salió de casa sobre las 01.40 horas para sacar de paseo a su perra, tras lo que vio que una mujer se encontraba tirada en el suelo del Paseo Marítimo de este núcleo costero en medio de gente que la rodeaba.
Nadie hacía nada. Simplemente la miraban y se preguntaban qué le pasaba, así que esta zalameña llamó al Servicio de Emergencias 112 para informar de lo que estaba sucediendo y, a continuación, la atendió mientras convulsionaba y puso en práctica sus conocimientos de primeros auxilios, una labor con la que evitó que la mujer se durmiera durante la media hora que tardó en llegar la ambulancia.
En ese momento, Eva María, que explicó por teléfono lo que intuía que le estaba ocurriendo a la mujer, se sorprende cuando ve que la ambulancia no estaba provista de equipo médico. «El técnico me dice que no puede hacer nada solo y que necesita un equipo médico. Le digo que eso es lo que yo he pedido hace media hora. Llama él e insiste que es esencial que acuda un médico», tras lo que este aparece y «actúa lo más rápido posible», pero tardó otros 20 minutos en llegar, tal y como narra esta zalameña, a quien los profesionales sanitarios le explicaron que el centro de salud de La Antilla cierra a las 20.00 horas y que, desde ese momento, las urgencias se derivan a Lepe.
El médico le dijo: «Le ha salvado la vida. Esta mujer se lo agradecerá siempre». Y por ello Eva María se fue satisfecha a la cama, aunque no sin lamentar «profundamente que los sanitarios tengan que hacer encajes de bolillos para atender una urgencia» y que «una playa no tenga servicio de atención médica a partir de las ocho de la tarde, con la multitud de personas que se concentran en un núcleo costero», expone esta vecina de Zalamea la Real, que además es la presidenta de la Hermandad de la Santa Cruz de El Romerito.
Eva María Vélez Pichardo da «las gracias a la labor del técnico, de los médicos y de la Policía Local, que en todo momento han hecho lo que estaba a su alcance», sostiene, tras lo que lanza un llamamiento a los partidos políticos y administraciones públicas: «Sin ánimo de entrar en cuestiones políticas y en dimes y diretes os digo y recuerdo que la salud está por encima de todo y que no se puede recortar en un servicio esencial para la vida», remarca.