La iniciativa nace de la colaboración de la farmacéutica con el Ayuntamiento
El Ayuntamiento de Cartaya y entidades del municipio han recibido este jueves a los más de 400 voluntarios del laboratorio farmacéutico Ferrer que han participado en las tareas de mejora y transformación de numerosos espacios de interés social del municipio, en los que el denominador común es la presencia de organizaciones y colectivos sociales, principalmente niños y niñas, mayores y personas vulnerables.
En un acto en el Pabellón de Exposiciones de la localidad, la alcaldesa de Cartaya, Pepa González Bayo, y el primer teniente de alcaldesa, David F. Calderón, han agradecido la labor de los voluntarios en diferentes puntos de la localidad donde se han llevado a cabo estas tareas que han mejorado de forma importante estos espacios.
Concretamente, un total de 434 empleados de Ferrer han llevado a cabo, en el marco de su compromiso activista, diversas actividades de reparación y apoyo social. En el CEIP Juan Ramon Jiménez, han realizado trabajos de mejora de las instalaciones, entre ellas del gimnasio, que resultó gravemente afectado por la DANA que azotó la localidad en septiembre, y en el colegio Juan Díaz Hachero, han acondicionado espacios de juego y otros espacios exteriores. En el comedor social ‘Ntra. Sra. De Consolación’ han efectuado reparaciones en las instalaciones para mejorar la calidad del servicio. Asimismo, han adecuado las instalaciones del centro de atención infantil temprana (ASPANDICAR), y han hecho mejoras en los espacios comunes de la sede de la Asociación de Mayores de El Rompido, para que éstas disfruten de un mayor confort.
Dentro de esta iniciativa de colaboración público-privada entre Ferrer y el Ayuntamiento de Cartaya, los voluntarios de la empresa también han construido un huerto urbano en la calle Teniente Díaz Hernández, en El Rompido.
La alcaldesa de Cartaya, Pepa González Bayo, ha agradecido “la solidaridad y el magnífico trabajo que han realizado los voluntarios, así como la apuesta por la educación, la apuesta social por los mayores y por los que menos tienen que han realizado los responsables de esta iniciativa”. “La sonrisa con la que los niños y niñas han recibido esta mañana la transformación de sus colegios pone de manifiesto, -ha señalado la regidora local-, la importancia de esta iniciativa”.
El primer teniente de alcaldesa, David F. Calderón, y concejal de Políticas Sociales, área que ha coordinado la iniciativa, ha destacado “la importancia de que se hayan transformado diferentes espacios sociales, culturales, y educativos, que son capitales para el desarrollo y la cooperación, para la potenciación del factor humano y el desarrollo sostenible”. “En una época histórica de desigualdad y fracaso del capitalismo salvaje, -ha señalado-, iniciativas como éstas deben abrir caminos hacia la justicia social, la redistribución de la riqueza y la necesidad de fortalecer el estado del bienestar. Con estas actuaciones, Ferrer multiplica la cooperación al crear espacios como el huerto social, los patios escolares y el centro de mayores, que fomentan la cooperación, la solidaridad y el desarrollo de actividades conjuntas entre pequeños y mayores”.
Por su parte, Ricardo Castrillo, Chief Commercial Officer de Ferrer, ha explicado que la actividad desarrollada en Cartaya forma parte del propósito de la compañía de “generar un impacto positivo en la sociedad”. “Todas las personas de Ferrer creemos que nuestra empresa, aunque principalmente se dedica al negocio farmacéutico, debe ser un medio para generar cambios sustanciales, a través de la participación en iniciativas de impacto social y medioambiental como esta. De hecho, toda nuestra estrategia como empresa se centra en las personas y el desarrollo de su talento, la protección del planeta y la lucha por tener una sociedad más justa y equitativa”, ha manifestado.