Las autoridades sanitarias locales han vacunado ya a más de 1.600 personas
La Comisión de Coordinación para la Seguridad del Coronavirus de Cartaya se ha reunido este miércoles en el Ayuntamiento, convocada por la alcaldesa, Pepa González Bayo, que la preside, para analizar la evolución de la cuarta ola de la pandemia en la localidad. Entre las medidas, se ha acordado intensificar la vigilancia en los tres núcleos de población.
Los miembros del comité técnico, que integran la Guardia Civil de Cartaya y El Rompido, la Policía Local, los responsables del Centro de Salud de Cartaya, y las áreas municipales implicadas en la gestión de la pandemia, han analizado la situación actual en detalle, y han realizado una evaluación de las medidas implementadas en la localidad, principalmente en materia de seguridad.
Así, la Policía Local ha realizado en las últimas tres semanas medio centenar de controles aleatorios en los tres núcleos de población, en los que ha interpuesto 206 actas de denuncia por incumplimientos de la normativa Covid: la mayoría (65), por incumplir el toque de queda, y por no respetar el cierre perimetral de la provincia (50 actas), a las que se unen 34 por no llevar mascarilla, 13 por permanencia y concentración de personas consumiendo bebidas en la vía pública y 5 por el incumplimiento de los límites de aforo y los horarios en establecimientos.
Las autoridades sanitarias locales han vacunado ya a más de 1.600 personas, a las que se unen los cartayeros y cartayeras que han sido citados fuera del municipio, y desde las distintas áreas municipales se ha dado cuenta de la colaboración municipal de cara a la vacunación y la realización de cribados, las labores de desinfección diaria en los tres núcleos y el dispositivo de limpieza y desinfección permanente en los centros escolares, donde se mantienen plenamente operativos estrictos protocolos, así como de las campañas comunicativas e informativas de concienciación social.
Por lo demás, el Comité ha acordado coordinar y poner en marcha nuevas actuaciones: las fuerzas y cuerpos de seguridad van a intensificar la vigilancia y los controles, haciendo especial hincapié en el refuerzo de la presencia policial en las plazas y espacios públicos; y el Consistorio va a reforzar la comunicación para trasladar las medidas en distintos idiomas a la población con que cuenta actualmente la localidad.
Finalmente, ha realizado un llamamiento unánime a la responsabilidad individual de los cartayeros, «porque su colaboración e implicación es fundamental para frenar la propagación del virus en nuestro pueblo y para que den fruto las medidas que se están adoptando». Así lo ha destacado la alcaldesa, que ha pedido «un último esfuerzo, porque el ritmo de vacunación sitúa mucho más cerca la meta, que es frenar el virus y recuperar la normalidad».