La Diputación publica el listado de municipios menores de 5.000 habitantes que se benefician este verano del programa

Los seis municipios de la Cuenca Minera de Riotinto que cuentan con menos de 5.000 habitantes están incluidos en el listado de localidades que se beneficiarán este verano de la campaña ‘Cine en el pueblo’, un programa de la Diputación Provincial de Huelva que tiene como objetivo la proyección de películas de reciente estreno al aire libre en pueblos y aldeas con poblaciones inferiores a 5.000 habitantes.

De esta manera, la campaña recalará este verano en Berrocal, El Campillo, Campofrío, La Granada de Río Tinto, Minas de Riotinto y Zalamea la Real, una vez que la institución provincial ha resuelto admitir las solicitudes presentadas por los seis ayuntamientos de estos municipios, así como de otros 47 consistorios de la provincia, con lo que el programa beneficiará a un toral de 53 localidades, tal y como se recoge en la resolución, a la que ha tenido acceso TINTO NOTICIAS -El periódico de la Cuenca Minera de Riotinto-.

La convocatoria consiste en la proyección de películas actuales seleccionadas por la Diputación siguiendo criterios de calidad cinematográfica, amenidad e interés público y destinadas mayoritariamente a un público familiar. Dichas películas se exhibirán, preferentemente, durante los meses de julio y agosto y de lunes a viernes, si bien el periodo podrá ser modificado por el Servicio de Cultura cuando existan elementos de juicio suficientes para ello.

Miles de vecinos y veraneantes en los municipios y aldeas que participan en la campana podrán disfrutar a las distintas películas programadas, pensadas para proyectarse en cualquier lugar y llegando, en algunos casos, a sitios donde el cine solo llega a través de la televisión. Un vehículo transporta todo lo necesario: equipos de proyección y sonido, pantalla, películas. Sólo es necesario una toma de corriente y sillas para que el público pueda disfrutar de una película de total actualidad.

Con esta campaña, la Diputación contribuye a cubrir el vacío existente en la provincia de Huelva en programaciones culturales de cine, agravado por la ausencia de salas comerciales ni públicas ni privadas en los municipios más pequeños y aldeas del territorio provincial. Además, la Diputación pone en marcha el programa ‘Cine en el Pueblo’ convencida de la “necesidad de reactivar las actividades culturales tras el parón sufrido con motivo de la crisis sanitaria por covid-19”, han destacado desde el ente supramunicipal.

La Diputación pondrá a disposición de los ayuntamientos participantes el personal técnico y el material necesarios: películas, equipos de proyección y sonido y pantalla. También llevará a cabo la selección de películas de distintos géneros y temáticas y editará un cartel genérico de la campaña 2021.

Por su parte, Los pueblos y aldeas brindarán personal de apoyo municipal para labores de carga y descarga, montaje y desmontaje o cualquier otra necesidad requerida por el técnico encargado de proyectar, así como un responsable municipal durante la proyección que garantice el adecuado desarrollo de la actividad.

Asimismo, adecuará un espacio al aire libre, cerrado en su contorno: toma de corriente, sillas para los espectadores y, en el supuesto de condiciones climatológicas adversas, habilitará una sala cerrada. En caso de plaza pública o parque municipal, prevé además el corte del alumbrado publico y el tránsito de vehículos.

El pasado año, unos cuarenta municipios y aldeas participaron de ‘Cine en el pueblo’ durante los meses de verano. Las plazas, terrazas y lugares públicos de los núcleos con menor población y menos posibilidades de disfrutar del séptimo arte en la gran pantalla fueron escenario de las proyecciones bajo el cielo estival desde julio hasta finales de agosto.

La Diputación puso en marcha la campaña ‘Cine en el pueblo’ en la década de los años 90 con la intención de cubrir el vacío existente en la provincia en programaciones culturales de cine. Hace dos años el programa emprendió una nueva etapa con el sabor agridulce que supone sustituir la antigua máquina de 35 milímetros por las nuevas tecnologías y la proyección digital.