La Delegación Territorial de Cultura, Turismo y Deporte ha abierto un expediente informativo para investigar un posible expolio en el yacimiento arqueológico de Corta Lago en Minas de Riotinto. La empresa Atalaya Mining, propietaria de la zona declarada BIC, ya ha denunciado los hechos ante la Guardia Civil, que en estos momentos está intentando identificar a los posibles autores.

En el informe preliminar realizado por el arqueólogo de la empresa que dirige los trabajos, Luis Iglesias, ratificado por los arqueólogos de la delegación territorial, se describe cómo en la mañana del pasado 8 de enero, al subir a trabajar al yacimiento, pudieron observar que había remociones de tierra que no habían sido realizadas por el equipo. Ante esta situación, procedieron a inspeccionar el yacimiento contabilizando hasta 54 afecciones realizadas mediante el empleo de un detector de metales.

Según reza en este informe, los movimientos de tierra en el terreno afectan a toda la superficie del yacimiento, tanto en la zona occidental como en la oriental, aunque con mayor incidencia en la parte oeste. Además de haberse removido ligeramente la estratigrafía de la zona occidental, en la misma aparecen varios agujeros. Aunque no puede determinarse si han conseguido llevarse algún hallazgo, por la naturaleza del yacimiento todo apunta a que es muy probable que hayan encontrado monedas u otros objetos metálicos de valor, aún no hallados en los trabajos que se están realizando.

Desde la Delegación Territorial de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Andalucía han condenado este «acto vandálico que constituye un delito contra el patrimonio», al tiempo que han mostrado su confianza en el trabajo de la Guardia Civil. Tanto el Seprona como la empresa ya han mostrado su compromiso para reforzar la seguridad en la zona de la excavación. Para ello, la Guardia Civil aumentará su presencia en el yacimiento y la empresa colocará una cámara de seguridad permanente en el mismo.