Con una inversión de más de 136.000 euros

La Asociación Paz y Bien y Fundación ‘la Caixa’ llevan colaborando desde el año 2017 en el fortalecimiento de las redes relacionales de las personas con discapacidad en el ámbito rural. Gracias a ello, ambas entidades trabajan con 60 personas anuales de 27 municipios de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche y El Andévalo.

Según han indicado ambas entidades en una nota de prensa, estos resultados han sido presentados a la delegada en Andalucía y Ceuta de la fundación, Miriam Mateos, en una visita a la sede de Paz y Bien en la capital onubense.

El responsable de Programas de la entidad, Israel Montes, y la coordinadora de los mismos en Huelva, Mar Santoyo, han podido constatar cómo estas iniciativas «hacen que la vida de las personas sea distinta», pues se trata de una población marcada por la «dispersión geográfica y la ausencia de recursos dirigidos, principalmente, a jóvenes con discapacidad intelectual».

Además de constatar el impacto de este proyecto en la población rural, el encuentro se ha enfocado también en reforzar la relación de colaboración de ambas entidades en la atención a personas vulnerables.

EL PROYECTO

La línea de trabajo marcada por ambas entidades desde hace seis años se centra en la realización de actividades formativas y de ocio inclusivo. Para ello, se ha llevado a cabo una inversión de 136.386 euros, de los que 89.340 euros han sido subvencionados por la fundación bancaria.

Así, da alcance a las aldeas y localidades de Las Herrerías, Cabezas Rubias, Los Montes de San Benito, Puebla de Guzmán, Santa Bárbara de Casas, Paymogo, El Almendro, Villanueva de los Castillejos, San Silvestre de Guzmán, San Bartolomé de la Torre, Alosno, Cumbres Mayores, Jabugo, El Repilado, Cortegana, Alájar, Santa Ana, Calabazares, La Corte de Cortegana, Almonaster la Real, Calabazares, Aroche, Aracena, Jabuguillo, Higuera de la Sierra, Valdelarco y Galaroza.

El objetivo es alcanzar un impacto positivo en las relaciones interpersonales, autoestima y calidad de vida de personas con discapacidad adultas a través del desarrollo de tres tipos de actividades: formación en autodeterminación, derechos y género; puesta en marcha de planes de ocio personales; y establecimiento de redes y alianzas comunitarias.

El compromiso de Paz y Bien con las comarcas Sierra de Aracena y Picos de Aroche y El Andévalo se concreta en las más de cien personas con discapacidad a las que acompaña. Para promocionar su autonomía y prevenir su dependencia, ha creado con la Administración servicios de día, ubicados en La Puebla de Guzmán y Galaroza.

Estas personas mantienen residencia en alguno de los 47 municipios de referencia, poblaciones menores a 10.000 habitantes. Esta atención es uno de los motivos que frena su éxodo. Paz y Bien aporta también una respuesta residencial en Cortegana para evitar el desarraigo, si carecen de apoyos familiares.