Las entradas ya están disponibles a través de Internet

El Parque Minero de Riotinto vuelve a ofrecer este verano, por tercer año consecutivo, recorridos nocturnos de su Ferrocarril Turístico, lo que se bautizó como el Tren de la Luna, una iniciativa que se puso en marcha en 2018 y que permite contemplar los increíbles paisajes de la Cuenca Minera de un modo completamente diferente, durante las noches de luna llena.

Desde la entidad gestionada por la Fundación Río Tinto han anunciado las dos primeras salidas del Tren de la Luna en el verano de 2020, que tendrán lugar los días 6 y 7 de agosto, para lo que ya están disponibles las entradas a través de Internet, concretamente en parquemineroderiotinto.es.

Eso sí, “reducimos aforo y aumentamos las medidas de seguridad” con motivo de la crisis sanitaria del coronavirus, han explicado desde el Parque Minero, que ha querido mantener “el encanto de una experiencia única en nuestra tierra”, han subrayado.

El Tren de la Luna ofrecerá a los viajeros una experiencia única que conjuga los infinitos matices cromáticos del recorrido de ida, aún con luz solar, y descubrir en el trayecto de vuelta una perspectiva distinta para los miles de personas que ya conocen el tren minero, las vistas de la ribera del Tinto con la iluminación exclusiva de la luna. Dos viajes en uno. El Tinto de día y el Tinto de noche.

La duración del viaje de ida y vuelta es de aproximadamente 140 minutos para que los viajeros, una vez llegados a la estación de Los Frailes, punto final del recorrido de ida, tengan tiempo suficiente para acercarse al río, realizar fotografías y disfrutar de un aperitivo si lo desean mientras esperan la salida de la luna, para lo que estará disponible un servicio de bar en la zona de merendero de las instalaciones ferroviarias.

El Parque Minero de Riotinto recibió 96.975 visitantes en 2019, una cifra que supone un incremento de 4.197, un 4,4 por ciento, respecto al año anterior, que se cerró con 92.778, con lo que se da continuidad al crecimiento sostenido que viene produciéndose en los últimos años, que tuvo un hito relevante al superar en 2017 la barrera de 90.000 personas.

Tras 27 años de trayectoria desde que el Parque abrió sus puertas en 1992, recibiendo 7.800 visitantes, el conjunto de la oferta diseñada por Fundación Río Tinto se ha convertido en el principal destino de turismo industrial de España, de modo que se cumple con el principal objetivo de la Fundación: poner en valor el patrimonio recuperado de 5.000 años de historia minera e industrial de la comarca para contribuir a su desarrollo socioeconómico favoreciendo su conocimiento y la generación de actividad asociada a las visitas.

En el crecimiento experimentado en 2019 destacan dos factores: el clima benigno, que ha sido la tónica del año, y la buena acogida a las novedades y mejoras introducidas, como la consolidación de los trenes nocturnos en las noches cercanas a la luna llena durante los meses del verano, la disponibilidad todo el año del Centro de Interpretación de Peña de Hierro y más recientemente la musealización de la galería Santa María en el antiguo complejo minero ubicado en el término municipal de Nerva, que el año anterior se vio gravemente afectado por el incendio de agosto que obligó a su cierre durante casi cinco meses.

Esto ha motivado un incremento de los acuerdos con touroperadores y agencias de viaje que contratan grupos organizados y ha llevado a que por primera vez se superen 10.000 visitantes al mes en cuatro de los doce meses del año: dos en primavera, uno en verano y uno en otoño, logrando así un mayor equilibrio estacional.

El perfil de los visitantes se mantiene en la tónica habitual, siendo el familiar el de mayor presencia, junto a los grupos de agencias de viajes y touroperadores y el segmento de centros docentes, que superaron los 21.000 alumnos de diferentes niveles educativos.

Con la incorporación progresiva de mejoras y una importante labor de mantenimiento y de promoción, Fundación Río Tinto ha creado un exitoso producto turístico de interior capaz de atraer visitantes en cualquier época del año. El recorrido en el antiguo ferrocarril minero en contacto con el peculiar ecosistema del río Tinto, el disfrute de los increíbles paisajes moldeados por la mano del hombre, la visita a la antigua mina Peña de Hierro incluyendo 200 metros de recorrido por una de sus galerías y el descubrimiento de la historia en el Museo Minero y la Casa 21 del barrio inglés conforman una experiencia completa y variada que satisface a todos los públicos, desde el aventurero hasta el cultural o científico.