Los trabajadores de la subcontrata Transportes Mineti exigen un nuevo protocolo para prevenir riesgos laborales

El comité de empresa de Transportes Mineti S.L., una subcontrata de Sánchez y Lago que opera en la mina de Riotinto y lleva a cabo las labores de transporte de toda la producción de mineral del Proyecto Río Tinto, ha comunicado a la autoridad laboral de la Junta de Andalucía la convocatoria de una huelga indefinida que comenzará el próximo 5 de agosto.

Según ha confirmado Comisiones Obreras, mayoritaria en la representación sindical, la decisión cuenta con el aplastante respaldo de la asamblea de trabajadores de la empresa (unos 60 operarios) y culmina una serie de desencuentros, denuncias, accidentes, despidos e inseguridad laboral que se han venido denunciando desde hace más de un año.

El detonante de la convocatoria de huelga indefinida ha sido la sanción impuesta por Transportes Mineti a uno de sus trabajadores, que temen que finalmente sea despedido tras las “vacaciones forzadas” a las que, según han indicado, ha sido sometido.

Los trabajadores exigen un nuevo protocolo de descarga de concentrado en la machacadora que sirva para prevenir riesgos laborales y minimizar o eliminar cualquier tipo de daño. Y es que, según denuncian, la empresa tiene implementado un “nefasto” sistema de operaciones que hace imposible el desarrollo seguro y planificado de su labor. Además, reclaman la paralización del despido en curso.

Los representantes de los trabajadores aseguran que la empresa les imputa fallos en las operaciones (no descargar los contenidos en los lugares marcados) que se deben a la falta de planificación, una mala praxis, a su juicio, que conlleva evidentes riesgos.

Las operaciones de minería que Transportes Mineti S.L. lleva a cabo en la instalación de Riotinto es desarrollada a diario por 30 camiones de entre 70 y 120 toneladas, que mueven más de 16.000 Tm de mineral.

Otras reclamaciones laborales

Aunque no está apuntado en el documento entregado a la Dirección Territorial de Empleo, los trabajadores del sector también demandan que la empresa debe darles de alta como trabajadores de la metalurgia y no tenerlos asentados bajo el epígrafe de transporte en carretera, una circunstancia que, además de mermar sus salarios, podría acarrearles perjuicios a la hora de la jubilación, pues las bases de cotización son más bajas. De hecho ya han denunciado estas prácticas “irregulares” ante la Inspección de Trabajo e incluso están pendientes varios juicios por este motivo.