En un año marcado por el alza de los costes, la empresa obtiene 1.000 toneladas de cobre menos que en el mismo período de 2021

Atalaya Mining ha presentado los resultados operativos de la Mina de Riotinto correspondientes al segundo trimestre de 2022. Durante este periodo, las instalaciones de procesamiento han tratado una cifra cercana a los cuatro millones de toneladas de mineral. Es un dato ligeramente mejor que el del primer trimestre del año, afectado por una huelga de transportes que provocó paradas inesperadas.

Sin embargo, la producción de cobre, en torno a las 13.300 toneladas de metal, cae un 7% con respecto al mismo período del 2021, cuando llegó a las 14.300 toneladas. La merma se explica por la disminución en la ley media, que se ha situado en un 0.39%, frente al 0.42% del 2021. A ello, hay que sumar la acusada subida en los costes de producción, principalmente el precio de la energía, uno de los pilares de la estructura de costes de esta operación.

Revisión a la baja de las previsiones para el año 2022

Con esta perspectiva, Atalaya ha revisado los objetivos que comunica trimestralmente al mercado, ajustando las cifras de producción de cobre prevista para el año 2022 desde las 54.000-56.000 toneladas anuales a las 52.000-54.000 toneladas. Esta revisión a la baja es producto de dos factores: los resultados del primer trimestre y la bajada en la ley media del cobre.

Otras iniciativas para la sostenibilidad

Atalaya mantiene el compromiso adquirido con el Pacto Mundial de las Naciones Unidas en el pasado 2020, avanzando en las varias iniciativas de desarrollo, eficiencia y sostenibilidad que ha presentado en los últimos años.

Así, continúa con sus planes de desarrollo en el suroeste peninsular, con proyectos como Masa Valverde, Riotinto Este u Ossa Morena, donde continúa progresando según lo planificado.

Además, ya han comenzado las obras de la Fase I de ELIX, proceso ideado por Eva Laín para producir cobre puro y recuperar metales como Zinc y Plomo en Riotinto. Esta primera fase cuenta con una inversión de 12 millones de euros para ponerse en marcha.

Por otro lado, se han iniciado las obras para construir la planta solar de 50 MW, una de las mayores de autoconsumo de España, que podría asumir hasta un cuarto de las necesidades energéticas de las operaciones, y que tiene previsto funcionar a finales de 2023.