Atalaya, Fundación Río Tinto y Ayuntamiento pondrán en marcha una hoja de ruta para el aprovechamiento turístico del histórico yacimiento minero
El Ayuntamiento de Minas de Riotinto, la Fundación Río Tinto y la empresa Atalaya Riotinto Minera han alcanzado un compromiso para colaborar en la apertura definitiva al turismo de la monumental Corta Atalaya, la histórica explotación minera a cielo abierto que hoy está inactiva desde el punto de vista minero.
Ya en 2016, Atalaya, la empresa que explota la mina activa de Riotinto y propietaria del terreno donde se encuentra Corta Atalaya, había cedido el uso turístico de este enclave al Ayuntamiento de Minas de Riotinto mediante un convenio de colaboración. El objetivo de la compañía era la puesta en valor de este relevante activo turístico, un «compromiso a largo plazo con el desarrollo de Minas de Riotinto y parte de su política de Responsabilidad Social con el entorno», señalan.
Sin embargo, no es hasta hoy cuando las tres partes acuerdan una hoja de ruta destinada a que el aprovechamiento turístico sea una realidad lo antes posible, «dando prioridad a la repercusión positiva sobre el municipio y sus vecinos y con todas las garantías de calidad y gestión que pueden aportar las partes», indican, al tiempo que explican que dicha hoja de ruta está necesariamente condicionada por las difíciles circunstancias actuales, muy delicadas para el mercado turístico debido a la pandemia del coronavirus.
No obstante, añaden, se aprovechará este tiempo para realizar una primera prueba con público visitante, que se desarrollará a lo largo de una semana, coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Turismo, un test que, según entienden las tres entidades, va a aportar información valiosa sobre el interés que genera la visita y todo lo necesario para que el acceso a Corta Atalaya se convierta en una experiencia memorable.
A partir de ahí, la intención de las tres partes es elaborar, con esta información, un plan para la apertura al público mediante un acuerdo beneficioso para todas las partes, para que, una vez la situación se normalice, la esperada noticia de la reapertura de Corta a las visitas suponga un espaldarazo para el destino Cuenca Minera de Riotinto y un gran atractivo para relanzar una futura campaña turística post-coronavirus.
De esta manera, empresa minera, Ayuntamiento y Fundación se comprometen a trabajar diligentemente para poner en valor Corta Atalaya, uno de los iconos de la minería mundial, como apuesta por el patrimonio minero de la comarca, su conservación y difusión, así como la necesaria diversificación económica del tejido empresarial del entorno de la mina.