La nueva Ley de Economía Circular impulsará a Andalucía al ver estratégicas las iniciativas sostenibles

La nueva Ley de Economía Circular de Andalucía, aprobada con el apoyo de los grupos parlamentarios de PP y PSOE, acaba de ser publicada en el BOJA y entrará en vigor el 1 de mayo. Esta ley ha sido acogida con expectación tanto por sectores económicos como colectivos ecologistas al suponer un paso definitivo en el respeto al medioambiente y lograr una economía verde.

En palabras del ente autonómico la Ley de Economía Circular de Andalucía (LECA), «una de las piezas más importantes para el desarrollo y progreso de la comunidad autónoma ya que incentiva y acelera la transición hacia una economía más competitiva, sostenible e innovadora, capaz tanto de renovar los sectores productivos tradicionales como de abrirse decididamente a las nuevas actividades demandantes de empleos vinculados a la economía circular». El texto detalla que los proyectos de actividades de valorización de residuos son considerados como inversiones empresariales de interés estratégico, lo que implica impulsar su puesta en marcha con el objetivo de obtener una red de beneficios para el empleo, el desarrollo económico y la protección del medioambiente.

Cobran especial importancia iniciativas empresariales que se están llevando a cabo en nuestra provincia amparadas por la Ley de Economía Circular y que basan su actividad en la valorización y regeneración de zonas afectadas por la minería histórica que actualmente representan un pasivo medioambiental.

Dentro de este mismo ámbito se enmarcan las conclusiones del estudio sobre la recuperación ambiental de terrenos de la minería histórica. Este estudio, elaborado por la empresa Fundación Centro Tecnológico del Agua (Cetaqua), marca las bases para poner en marcha un plan de restauración de las zonas con pasivos mineros históricos de Huelva. Los resultados de este informe fueron presentados en la Mesa de la Minería, en la que se encuentran representadas entidades como la Asociación de Empresas Investigadoras, Extractoras, Transformadoras Minero-Metalúrgicas, Auxiliares y de Servicios (Aminer), la Asociación de Comunidades de Regantes de Huelva (Corehu), la empresa pública de Gestión Integral del Agua de Huelva (Giasha) y la Asociación de Industrias Químicas, Básicas y Energéticas de Huelva (AIQB).

Todas las partes interesadas han coincidido en que las conclusiones del estudio son acertadas y necesarias. La principal conclusión no ha admitido debate: es vital para Huelva la restauración de las zonas mineras degradadas. De hecho, se hace imprescindible para la mejora de la calidad ambiental del territorio, poner en marcha acciones encaminadas a regenerar el medio natural.

De esta manera, Andalucía y Huelva se ponen a la vanguardia con esta nueva ley. Una norma que favorece el crecimiento y permite avanzar hacia un modelo social y económico más sostenible con nuevas vías de empleabilidad a través de actividades novedosas y que mejoran el medio natural.

Por Andalucía propone la aprobación de una Ley de Función Pública de consenso 

Alejandro García ha recordado la importancia de que la Junta de Andalucía cuide «al personal que sostiene nuestros servicios públicos»

El cabeza de lista de la coalición de izquierdas Por Andalucía, Alejandro García, ha dado comienzo a la campaña electoral en Huelva haciendo un alegato en favor de la mejora integral de la situación del empleo público de la administración autonómica, «denostado en demasiadas ocasiones por desconocimiento, desinformación e intereses espúreos». 

Con la aprobación de la Ley de Función Pública, Por Andalucía busca solucionar el problema de catalogación de los grupos profesionales de las y los trabajadores, y garantizar la estabilidad de todo el personal funcionarial o laboral en fraude de ley por abuso de la temporalidad. García ha recordado la importancia de que la Junta de Andalucía cuide al personal que sostiene nuestros servicios públicos, «que son los que hacen, en definitiva, que Andalucía funcione». Sobre esto ha añadido «la necesidad acuciante de que la administración autonómica dé certezas y horizontes ilusionantes a su personal, y esto pasa ineludiblemente por la estabilización y la promoción de la carrera profesional vertical y horizontal». 

Alejandro García también ha hablado sobre la urgencia de plantear todas las nuevas incorporaciones de empleo público en la Junta de Andalucía desde una perspectiva de garantía del relevo generacional, bajo los principios de igualdad, mérito y capacidad, y poniendo el foco, sobre todo, en aquellos servicios más afectados por «la brutal descapitalización que supuso la tasa de reposición impuesta en su momento por el Gobierno de Rajoy». En palabras del candidato de Por Andalucía, «es el momento de aprovechar el conocimiento, la experiencia y la inteligencia colectiva de las y los trabajadores de la administración autonómica para hacer unos servicios públicos más eficientes y útiles a la ciudadanía». Entre las prioridades que se marca la coalición de izquierdas se encuentra la mejora del servicio público de Justicia, «que necesita una dotación de recursos, infraestructuras, equipamientos y, sobre todo, personal que permita descongestionar nuestros juzgados». 

Según ha explicado García, «que la administración de Justicia esté completamente colapsada y sobrepasada tiene consecuencias negativas para la población y también para nuestra economía, porque una Justicia lenta es cualquier cosa menos justa». Además, ha lamentado que «la Justicia haya sido siempre la última preocupación de los sucesivos gobiernos autonómicos de PSOE y PP». Por último, Alejandro García también ha tenido unas palabras de reconocimiento para las y los profesionales de Canal Sur, «que desempeñan su trabajo con la mejor de las voluntades en un contexto de permanentes presiones políticas y bajo un clima de recortes y precariedad insoportables». 

Comienza la tramitación de la Ley Andaluza del Flamenco

El Consejo de Gobierno de la Junta autoriza el inicio del anteproyecto de la norma, que incorpora su enseñanza a todas las etapas educativas

El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha autorizado el inicio de tramitación del Anteproyecto de la Ley Andaluza del Flamenco, cuyo objetivo principal es la protección, conservación, fomento y difusión de este arte como máxima seña de identidad de la cultura andaluza.

La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico busca establecer con esta norma, que contará con 34 artículos y cuatro disposiciones adicionales, el régimen jurídico del flamenco, con el fin de garantizar su salvaguarda para su uso como bien social y como patrimonio inmaterial de Andalucía. Para ello, incluirá medidas para su protección, conservación, difusión e investigación, así como para la promoción de su conocimiento y la importante contribución a este arte del pueblo gitano.

La Ley busca, por tanto, el fomento del flamenco como elemento singular de la cultura andaluza, su promoción y valoración como elemento importante del patrimonio andaluz, así como estimular la creación y el asociacionismo, garantizando la conservación, la recuperación y la puesta en valor del conjunto patrimonial del flamenco en todas sus manifestaciones.

El objetivo del Gobierno andaluz es promover la difusión del flamenco en el exterior y garantizar su conocimiento y su acercamiento a la sociedad, con especial atención a sectores sociales desfavorecidos o especialmente vulnerables, para facilitarles su integración y dignidad personal, valorando la especial importancia que toma la introducción de la enseñanza del flamenco en todas las etapas educativas en Andalucía.

La Ley marca las competencias que tanto el Consejo de Gobierno como la Consejería competente y las entidades locales tienen en los objetivos de fomentar, preservar, conservar, difundir y proteger el flamenco y crea instrumentos para ello como el Plan General Estratégico, que será aprobado por el Ejecutivo andaluz y que marcará las acciones, prioridades y necesidades básicas del flamenco para lograr los objetivos principales de la Ley.

De igual modo, con objeto de ordenar, promocionar y planificar las actividades y entidades con incidencia en materia de flamenco, la Ley crea el Registro Andaluz de Flamenco, de carácter público y dependiente de la Consejería, cuya finalidad será servir como instrumento administrativo para el conocimiento, publicidad y ordenación de los profesionales y entidades que desarrollen actividades relacionadas con el flamenco en Andalucía.

El flamenco en los centros educativos

En colaboración con la Consejería de Educación y Deporte y con el apoyo del resto del Consejo de Gobierno, la Ley recoge que la Administración educativa impulsará la presencia y el conocimiento del flamenco en las distintas etapas de la enseñanza no universitaria, mediante la inclusión de contenidos curriculares y el desarrollo de actividades relacionadas con el flamenco, así como la elaboración de un Plan de Formación Anual para el profesorado en esta materia.

Por otro lado, se impulsará la investigación del flamenco en el ámbito universitario y en el Espacio Europeo de Educación Superior con la colaboración de universidades, conservatorios y la posibilidad de crear cátedras de flamencología. Este apartado es clave para preservar, conservar y fomentar el conocimiento y el legado del flamenco en todas las etapas educativas y, sobre todo, entre los más jóvenes.

La Consejería de Cultura entiende que se trata de una Ley clave para esta tierra, cuna del flamenco, que a su vez constituye la principal seña de identidad de la cultura andaluza, que la distingue ante el resto del mundo y que además es Patrimonio de la Humanidad. Ahora contará con un instrumento de máximo rango para ordenarlo jurídicamente y garantizar su protección, su difusión y su fomento, por lo que se confía en lograr el máximo consenso en el trámite parlamentario.

La iniciativa, fundamental para esta legislatura en la Consejería de Cultura, responde al
compromiso del Gobierno andaluz con este arte y su protección. Pero también es una
respuesta a dos mandatos parlamentarios (Proposición no de Ley de septiembre de
2016 aprobada por la mayoría de la Cámara y una Declaración Institucional del Pleno
del Parlamento en diciembre de 2020), así como a lo establecido en los artículos 37 y
68 del Estatuto de Autonomía.