El guardameta del PSG tendrá que seguir recuperándose de las lesiones en su domicilio
Este viernes ha traído una razón para la alegría y la sonrisa en la vida de Sergio Rico y su familia. Tras 82 días llenos de incertidumbre y preocupación debido al accidente sufrido por el jugador del PSG el pasado 28 de mayo en El Rocío, finalmente el futbolista ha sido dado de alta del Hospital Sevillano Virgen del Rocío.
La travesía desde aquel fatídico día hasta este momento ha sido un arduo camino. Desde pasar largo tiempo en la Unidad de Cuidados Intensivos luchando por su vida hasta semanas de progresos en su recuperación que le permitieron continuar en su hogar para seguir sanando. “Ha sido un sueño, gracias a Dios he salido”, fueron las primeras palabras de Sergio Rico al abandonar el hospital.
Con emoción palpable en su voz, el portero sevillano compartió sus sentimientos en este momento de triunfo: “Dicen que el cerebro es inteligente y borra todo este tipo de sucesos. Ha sido un sueño. Me desperté en el hospital y gracias a Dios he salido. Me siento muy emocionado, muy feliz y dando gracias. Doy gracias a mi mujer, a mi familia, a todos los que lo han estado aquí… Ella ha pasado 20 horas diarias conmigo. Estoy muy agradecido y sin su apoyo no habría sido posible”, expresó Sergio Rico en compañía de su esposa, Alba Silva.
La laboriosa contribución de Alba Silva, su esposa y uno de sus mayores pilares, fue fundamental en este proceso. Ella compartió en sus redes sociales la noticia de su regreso a casa, aunque la recuperación aún continúa.
Continúa la recuperación de Sergio Rico
La magnitud del accidente exige una recuperación sin fechas ni metas a corto plazo, enfocándose primero en recuperar la normalidad en su vida. Sergio Rico ha contado con un amplio respaldo, desde el PSG, donde aún está bajo contrato, hasta la comunidad futbolística en España. Su club de formación y los aficionados del Sevilla han demostrado un apoyo inquebrantable, incluso homenajeándolo en eventos recientes, como el partido inaugural de Liga ante el Valencia.
Este capítulo marca un nuevo comienzo en la vida de Sergio Rico, un desafío que lo verá luchando con determinación para volver a los terrenos de juego. Sin embargo, lo más significativo es que regresa a su hogar, marcando un hito en su proceso de recuperación y demostrando el poder del apoyo y la tenacidad en la superación de adversidades.
