La alcaldesa destaca que «el trabajo realizado empieza a dar sus frutos»

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo ha suspendido el trámite de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) concedida por la Junta de Andalucía a la futura planta de tecnosoles de Minas de Riotinto, lo que supone un «freno» al proyecto que Atalaya Mining pretende poner en marcha en la localidad para la «regeneración los terrenos afectados por la minería histórica», que actualmente siguen generando contaminación de las aguas de la cuenca del Odiel.

Así lo han comunicado desde el PSOE de Huelva, que se opuso al proyecto a través de las alegaciones presentadas por sus alcaldes y alcaldesas de la Cuenca Minera de Riotinto, por lo que consideran que la decisión judicial es «una buena noticia que deja patente que el trabajo realizado empieza a dar sus frutos» y compensa la «negativa» a la planta que a su juicio mantiene la ciudadanía de la comarca.

«Atendiendo al clamor ciudadano», los socialistas han trabajado «al unísono para evitar que se haga más daño al territorio y a la población con proyectos que, lejos de generar riqueza y empleo, empobrecen a la comarca», sostienen, al tiempo que reafirman su compromiso con que la planta no se instale en la zona y critican que «el Gobierno de Moreno Bonilla no tuvo en cuenta a los vecinos y vecinas de la Cuenca Minera» al conceder la AAI.

En esta línea, la alcaldesa de Minas de Riotinto, Rocío Díaz, en nombre de los ediles socialistas, ha calificado este pronunciamiento del Juzgado como «una buena noticia que deja patente que el trabajo del Ayuntamiento de Riotinto, así como el de El Campillo, Zalamea, Campofrío y la Granada de Riotinto, ha dado sus frutos”.

Según Díaz, “hemos llegado hasta el final y estamos muy contentos porque ha sido la jueza la que ha paralizado ese trámite. Nosotros siempre vamos a estar en esa vía de de lo legal y de lo justo, hasta que ella no resuelva no se puede montar ninguna planta de tecnosoles en el terreno de Riotinto”, ha agregado.

La alcaldesa ha señalado que “no hay ninguna autorización por ninguna parte», pues «la compatibilidad urbanística no la da el Ayuntamiento de Riotinto. Ni la alcaldesa ni los técnicos del Ayuntamiento deciden lo que es compatible o no. Por lo tanto, no hay nada que el Ayuntamiento de Riotinto ni los de la comarca le hayan dado a esta planta”, ha añadido.

Los alcaldes y alcaldesas socialistas aseguran que tienen claro cuál es el modelo que quieren para la comarca, «un modelo en el que se respete el medio ambiente y donde se genere empleo digno y de calidad. Y eso pasa por que el presidente de la Junta de Andalucía, Moreno Bonilla, mire al territorio de manera positiva y no como un vertedero», agregan.

Por último, desde el PSOE de Huelva han recodado que la planta está «proyectada en el término de Minas de Riotinto a una distancia muy corta de El Campillo y a solo tres kilómetros de distancia de donde está ubicado actualmente el polémico vertedero de Nerva», al tiempo que señalan que «ha sido fruto de polémica desde el minuto uno porque la ciudadanía ya sufre desde hace años las consecuencias negativas del vertedero de Nerva y no están dispuestos a que esta comarca se convierta en el vertedero de Europa».

Suelos fértiles para la regeneración ambiental

La decisión judicial se produce unas semanas después de que Atalaya Mining, empresa operadora en la mina de Riotinto, diese a conocer esta una nueva iniciativa dentro de su “estrategia de diversificación” de la Cuenca Minera: la puesta en marcha de una «industria de producción de suelos fértiles» que supone una inversión de siete millones de euros y la creación de 50 empleos directos, al tiempo que incluye la “última tecnología y soluciones innovadoras”.

La nueva fábrica producirá tierras diseñadas “a la carta” para regenerar los terrenos afectados por la minería histórica, corrigiendo factores como la acidez, ya que actualmente estos siguen generando contaminación de las aguas de la cuenca del Odiel, impidiendo su aprovechamiento para consumo y regadío. Además, las tierras producidas contribuirán a la restauración de las instalaciones mineras actuales, según obliga la autorización ambiental de la mina, cuyo cumplimiento es imprescindible para la continuidad de las operaciones, añadieron desde la compañía.

Esta iniciativa forma parte del proyecto ‘Horizonte 2035’, una visión estratégica que impulsa Atalaya Mining para el futuro de la comarca y que tiene como objetivo crear tejido industrial y empresarial paralelo a la actividad de la mina. La estrategia se desarrolla en base a cinco pilares: minería y metalurgia, economía circular, energía, turismo y formación, según han informado desde la propia compañía.

La nueva fábrica se encuadra en la rama de Economía Circular, pues utiliza como materia prima la mezcla de algunos subproductos como rocas de mina, cenizas de biomasa, materia orgánica y restos de podas. La empresa tendrá un registro público de los materiales que adquiera como materia prima y que “no suponen ningún riesgo para la salud y mejoran los suelos existentes”, para lo que contará con el asesoramiento de la Universidad de Huelva gracias al convenio suscrito con el departamento de Ciencias de la Tierra, cuyos técnicos identificarán los materiales aptos para la regeneración de Riotinto.

Las nuevas tierras producidas se aplicarán sobre terrenos actualmente afectados, generando una capa de suelo que permita el crecimiento de especies vegetales autóctonas, la vuelta de la fauna y la mejora de la calidad de las aguas, corrigiendo su acidez hasta parámetros naturales. El proceso ha demostrado su “validez e inocuidad” gracias a las pruebas que se han realizado en las instalaciones de Atalaya, donde se ha restaurado una hectárea de terreno con “resultados excelentes”, informa la compañía.

“Estamos orgullosos de contribuir al desarrollo de la provincia de Huelva trabajando por la recuperación de la cuenca del Río Odiel, afectada por la minería en una época en que no había regulación ni conciencia ambiental. El producto de la nueva instalación va a permitir además la continuidad de nuestras operaciones, pues garantiza que los terrenos que afectamos hoy van a quedar perfectamente restaurados cumpliendo con las exigencias que nos marca la ley”, destacaba Enrique Delgado, director general de Atalaya Riotinto.

Además, Delgado señaló que “queremos mirar de frente a un horizonte en el que Cerro Colorado, la mina que alimenta nuestra producción, empiece a declinar. Trabajamos en varias líneas para que la Cuenca Minera siga desarrollándose, manteniendo su calidad de vida y la capacidad de ofrecer un proyecto vital a su gente”, ha agregado. En la actualidad, Atalaya genera un total de 2.355 empleos (directo, indirecto e inducido), equivalente al 1.2% del empleo de la provincia de Huelva, según el estudio socioeconómico elaborado por Sintering (Universidad de Huelva).