La alcaldesa de Riotinto, Rocío Díaz Cano, realiza un balance de su primer año de gestión municipal
El pasado 15 de junio se cumplía el primer año de la constitución de las nuevas corporaciones locales y la alcaldesa de Minas de Riotinto, Rocío Díaz Cano (PSOE), ha hecho un balance de su primer año de gestión en una entrevista concedida a TINTO NOTICIAS -El periódico de la Cuenca Minera de Riotinto-, donde ha destacado, entre otros aspectos, que «ahora estamos en la casa del pueblo para todos y todas los vecinos y vecinas».
– ¿Qué balance realiza de su primer año de gobierno tras la constitución de las nuevas corporaciones municipales?
– Mi primer año como alcaldesa ha sido un año difícil y duro. La situación del Ayuntamiento es complicada y se hace difícil el día a día buscando mejoras económicas para paliar la deuda y a su vez teniendo que trabajar para mantener el pueblo bien y generando bolsas de empleo para las personas que necesiten ingresos, sobre todo ahora después de una pandemia que ha asolado a medio mundo. Pero si tengo que definir de alguna manera este primer año de gobierno, mi balance es positivo, porque me ha hecho aprender la importancia que tiene el buen trabajo de una institución para las personas de tu pueblo, y además, he aprendido muchas cosas que me servirán de experiencia en los siguientes años que esté al frente de este Ayuntamiento.
– ¿Cuáles son las actuaciones más destacadas que ha llevado a cabo durante este año?
– Este año hemos intentado ordenar el desorden que hemos encontrado en el Ayuntamiento de Riotinto, tanto en la plantilla interna como en el pueblo en general. Hemos hecho diferentes acciones en instalaciones y calles de nuestro pueblo con asfaltados y arreglos del firme, además de algunos edificios municipales. Hemos reabierto el cine y hemos fomentado diversas actividades culturales y de ocio que nos han parecido curiosas. En cuanto a las fiestas, hemos creado varios momentos inolvidables y que estoy segura que quedarán para la historia como las preuvas y el cotillón de Fin de Año, ambos con un gran éxito entre los vecinos. Y también abrimos las puertas del Ayuntamiento por primera vez a nuestra Esquila.
Pero lo más importante para mí es la participación ciudadana. Hemos intentado que el vecino se sienta en su casa y se acabe la idea de que el alcalde o la alcaldesa es una persona inaccesible que me dará cita cuando ella pueda. Ahora estamos en la casa del pueblo para todos y todas los vecinos y vecinas de Riotinto.
De otra parte, el fomento del empleo en todas sus vertientes con cursos y convenios con las principales empresas también es una de nuestras líneas trabajadas y una de las que necesitan mucho más trabajo aún.
– ¿En qué ha cambiado principalmente la gestión municipal durante este año tras ocho años de gobierno municipal del PP?
– En prácticamente todo. Ahora no hay ciudadanos de primera y de segunda, ahora son todos iguales. Nadie es mas que nadie y por eso nadie entra a dedo en la desorbitada plantilla que hemos encontrado en el Ayuntamiento. Por eso hemos creado una bolsa de empleo que se ha reanudado ahora que ha acabado el periodo de confinamiento, ya que las pruebas físicas que implicaban las bolsas no eran apropiadas en momentos de pandemia. El Ayuntamiento está abierto a todos y así lo demostramos día a día mi equipo de gobierno y yo. La gestión municipal parte de la idea principal del estado económico en el que nos encontramos, por eso trabajamos con los pies en la tierra, no pretendemos hacer algo que no es posible.
– Lamentablemente, la última etapa de este primer año ha estado marcada por la crisis del coronavirus. ¿Qué actuaciones habéis llevado a cabo para prevenir el contagio y qué actuaciones habéis emprendido y queréis emprender para paliar sus efectos?
– Hemos intentado estar a la altura de algo tan difícil como una pandemia mundial para la cual nadie estaba preparado. Hemos llevado a cabo muchas acciones para ayudar a las personas más necesitadas en esta pandemia, como por ejemplo el Plan Municipal de Garantía Alimentaria, con el que, con fondos propios, se han hecho compras y dado alimentación a familias vulnerables. Hemos sido uno de los primeros pueblos de la provincia en repartir mascarillas lavables casa por casa a todos los vecinos de nuestro municipio. Hemos creado un plan de fomento de los comercios municipales, a parte de ayudarles con un kit para reabrir sus puertas. Hemos eliminado tasas para los hosteleros que tienen que colocar sillas en la vía pública y además les hemos permitido aumentar la ocupación de la vía pública para mantener la distancia necesaria.
Hemos intentado que los vecinos sientan el Ayuntamiento como su casa, y creo que lo hemos conseguido. Quiero agradecer desde aquí a todas las asociaciones que han colaborado económicamente con nuestro Ayuntamiento para ayudar a los más necesitados y además a todos los trabajadores municipales que han estado al pie del cañón en una época tan difícil.
– ¿Cuáles son las principales actuaciones, proyectos y retos en los que estáis trabajando de cara al futuro?
– No voy a desvelarle sorpresas, pero tenemos muchas cosas en el tintero y sobre todo muchos planes que serán muy bien acogidos por nuestros vecinos. Pero vuelvo a decirle que todos son con los pies en la tierra, con la ambición justa y necesaria para planes factibles y a corto plazo. Hay que tener en cuenta que es necesario trabajar bien para acabar con la deuda municipal y hay que continuar pagando facturas impagadas y sentencias judiciales por impago.
– Este es su primer año como alcaldesa. ¿Qué es lo que más satisfacción le ha producido de esta responsabilidad y qué es lo que menos le gusta de ella?
– Siempre me he sentido orgullosa de mis raíces. Mi familia es obrera y minera, de principio a fin, y me siento parte de esta tierra. La responsabilidad es complicada en cualquier aspecto de la vida y en cualquier trabajo, quizás en este un poco más, pero no puedo decirte que no me guste ese exceso de trabajo y responsabilidad.
No hay nada que no me guste, me apasiona ser la representante del pueblo al que amo, me apasiona poder solucionar los problemas de los vecinos y me enfada no poder solucionar algunos o al menos no poder hacerlo de forma inmediata.
Me quedo con muchos momentos de la Alcaldía, pero sin duda me quedo con las personas, con mis vecinos, con sus sonrisas y sus saludos. Nos dan fuerza día a día. También me quedo con acompañar por primera vez como alcaldesa a nuestra Virgen del Rosario y a nuestra Esquila. Ha sido uno de los momentos más bonitos de mi vida.