Usuarios del camino lamentan que tiene que sortear hondonadas de hasta 40 centímetros
Un grupo de vecinos de Zalamea la Real ha criticado el mal estado en que se encuentra la antigua vía de ferrocarril entre Zalamea la Real y El Campillo, un camino recuperado hace años como vía verde para conectar ambas localidades de la Cuenca Minera de Riotinto.
La vía, muy utilizada por vecinos y vecinas para caminar a pie o circular en biclicleta o moto, cuanta desde hace semanas con hondonadas de hasta 40 centímetros, tal y como lamentan algunos usuarios de este camino y puede apreciarse en el vídeo que ilustra esta información.
Este grupo de usuarios, que ha contactado con TINTO NOTICIAS para dar a conocer el mal estado de la vía, explica que esta situación se produce sobre todo en los primeros 700 metros de camino desde la localidad campillera, donde hay «grandes agujeros» que lo hacen incluso «peligroso para las caderas», lamentan.
Asimismo, aseguran que esta vía «lleva bastantes años así», pero «cada año empeora», sobre todo después de días de lluvia como los que hubo hace unas semanas, alertan, por lo que reclaman a los ayuntamientos de El Campillo y Zalamea la Real que procedan a la reparación del camino, aunque son conscientes de que es propiedad de una empresa privada.
Una vez escuchada la queja de estos usuarios de la vía, esta redacción se ha puesto en contacto con los ayuntamientos para conocer sus intenciones al respecto. El alcalde de El Campillo, Juan Carlos Jiménez, asegura que la voluntad de ambos consistorios es llevar a cabo una actuación para mejorar el estado del camino, para lo que se encuentran estudiando de qué forma hacerlo, ha añadido.
Jiménez ha detallado que en un principio querrían arreglarlo mediante la utilización del fresado de las carreteras, tal y como se ha hecho en el camino que une El Campillo y Minas de Riotinto, pero la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ya no permite la reutilización de ese producto en el arreglo de caminos, sino que tiene que ir a plantas de reciclaje, según ha indicado el propio alcalde campillero.