La tradición se remonta a la visita que hacían los calañeses al Cristo de España

El municipio de Calañas ha comenzado a celebrar este viernes lo que se conoce popularmente como los ‘Viernes de Marzo’, una tradición que consiste en caminar desde el pueblo hasta la ermita de la Virgen de Coronada en Sotiel Coronada la tarde de todos los viernes de marzo.

En total, los calañeses recorren los casi ocho kilómetros que separan el municipio del templo y que también sirve como preparativo para la celebración de la romería en honor a la patrona que arrancará sus festejos el Lunes de Pascua.

Según ha publicado en su blog el presidente de la Banda de Música de Calañas, Cristóbal Llanes Baquero (http://cristoballlanes.blogspot.com/2019/03/los-viernes-de-marzo.html), la tradición de caminar hasta Sotiel cada viernes de marzo es una antigua costumbre que, en su origen, no era para visitar la imagen de la patrona de Calañas, sino la imagen del Cristo de España que se encuentra en la ermita de la Virgen de España (patrona de Beas) frente al santuario de la Coronada.

Esta costumbre se mantuvo a lo largo del tiempo hasta la desaparición, durante la Guerra Civil, de las imágenes de la Coronada y el Niño, tallas realizadas por Felipe Fernández del Castillo en 1769.

Según recoge el citado blog Llanes, en 1937 tuvo lugar la bendición de las nuevas imágenes de la Virgen y el niño. Esa bendición se realizó el primer viernes de marzo en la carretera del Sotiel de la mano del párroco José González Marín. Desde ese momento, la peregrinación de los ‘Viernes de Marzo’ cambió del Cristo de España a la Virgen de la Coronada.

La peregrinación comenzó sobre las 15.30 del viernes con los miembros de la hermandad de de la Coronada a la cabeza y terminó con la celebración de una misa tras la llegada de los peregrinos.