La empresa minera apuesta por «una iniciativa de responsabilidad a favor del patrimonio natural, el turismo local y el disfrute de los vecinos de la Cuenca Minera»
Atalaya Mining, operadora de la mina de Riotinto, como parte de su acción de responsabilidad social, decidió asumir las labores de restauración ambiental de algunas de las fincas más emblemáticas arrasadas en el incendio de Nerva de 2018, tras lo que, en concreto, la empresa minera está restaurando casi 20 hectáreas de terrenos aledaños a Peña de Hierro, propiedad de la Fundación Río Tinto y una de las principales atracciones turísticas de la provincia.
Para ello, a principios de otoño, en colaboración con la referida entidad y el Ayuntamiento de Nerva, se puso en marcha el ‘Plan de Restauración de Terrenos Forestales Incendiados de los Montes Terreros y Tejonera’, cuya ejecución marcha «a buen ritmo» y se espera quede finalizada en los próximos meses, según han destacado desde la empresa minera.
“El compromiso con el medio ambiente y con el territorio en el que desarrollamos nuestra actividad son objetivos de Atalaya Mining”, ha remarcado el director general de la compañía, Enrique Delgado, para quien «este es un lugar clave de nuestro entorno», por lo que «poder llevar a cabo esta restauración era un ejercicio de responsabilidad que se ha convertido en un orgullo compartido para todos nosotros», ha señalado.
Además, desde la empresa han incidido en que el incendio supuso daños emocionales para la comunidad del entorno: «la pérdida de calidad paisajística y recreativa del monte afecta al territorio en muchos aspectos, tanto en la comercialización del producto turístico minero y rural como al propio uso y disfrute de los vecinos de la zona», por lo que el alcalde de Nerva, José Antonio Ayala, aseguró estar “de enhorabuena, porque la responsabilidad social que viene ejerciendo Atalaya pinta de verde nuestro bosque calcinado para el disfrute futuro de los nervenses y de los que vienen a conocer este paraje único en el mundo”.
Y es que el Paisaje Protegido ‘Montera de Gossan’ era una zona muy transitada por los habitantes de la Cuenca Minera y por multitud de turistas que venían a disfrutar de la experiencia de visitar la Peña de Hierro de la mano de la Fundación Río Tinto y su Parque Minero. En este sentido, José Luis Bonilla, director de Fundación Río Tinto, afirmó que «los trabajos que ahora se acometen gracias al compromiso de la compañía Atalaya Mining con el entorno harán posible que este enclave singular recupere todo su esplendor, para que pueda ser admirado por los miles de personas que cada año nos visitan».
El Plan incluye diversas actuaciones encaminadas a formar una nueva masa forestal que pueble rápidamente la zona afectada, empezando con la corta y retirada de árboles calcinados, la construcción de fajinas y albarradas para evitar la erosión y la siembra de árboles y especies vegetales autóctonas.
Hasta la fecha, los trabajos avanzan según lo planificado y la regeneración natural está respondiendo con densidades muy altas en algunos casos, dada la especie dominante antes del incendio (Pinus pinaster), han explicado desde la compañía, que previamente a las actuaciones estableció un período de “parada” necesario para comprender la evolución del monte y así planificar las medidas necesarias en el área incendiada.
El objetivo inmediato del plan de restauración es controlar los procesos erosivos provocados por la escorrentía en las zonas de mayor pendiente y conseguir en los rodales incendiados la implantación de una masa pura o mixta de pinar. A medio plazo, el plan considera la transformación a masas mixtas de coníferas y frondosas, y a frondosas finalmente (alcornocales, por ejemplo), fomentando el desarrollo de matorral noble y adecuando las masas hasta alcanzar una espesura acorde con su edad.
1.700 hectáreas arrasadas
En el incendio, que tuvo lugar el 2 de agosto de 2018 y cuyas causas aún se desconocen, se quemaron 1.700 hectáreas. El siniestro arrancó en la Sierra del Padre Caro y se propagó por la Sierra de San Cristóbal, arrasando los montes propiedad de la Fundación Río Tinto. Entre otros, el fuego calcinó la totalidad de los terrenos donde se enclava la histórica Peña de Hierro, un epicentro del turismo industrial de la provincia, y la Montera de Gossan, un paraje geológico espectacular, catalogado como Monumento Natural.
Sobre Atalaya
Atalaya Mining es la operadora de la histórica mina de Riotinto, un nuevo proyecto minero que incorpora las «últimas innovaciones tecnológicas» en el sector, así como los conceptos de «seguridad y sostenibilidad ambiental propios de la minería del siglo XXI».
Riotinto es hoy una mina de cobre a cielo abierto que ha producido 55.890 toneladas de cobre en concentrado en 2020. Cuenta con 197 millones de toneladas de reservas de mineral de cobre y trabaja constantemente en la identificación de nuevos recursos para seguir alargando la vida de la explotación, que actualmente se sitúa en 12 años. La puesta en marcha del Proyecto Riotinto ha supuesto una gran inversión industrial, incluyendo «importantísimas» mejoras ambientales y la creación de más de 450 empleos directos.
Atalaya es una empresa adherida a la Red Española del Pacto Mundial de Naciones Unidas, un compromiso con los Diez Principios del Pacto Mundial y los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) aprobados por la Asamblea General de Naciones Unidas. Estos se sustancian en la ‘Agenda 2030’, un plan de acción en favor de las personas, el planeta, la prosperidad y la paz. Se trata de una «apuesta» de Atalaya Mining por la responsabilidad que alinea los objetivos de negocio con una gestión sostenible de sus operaciones desde el aspecto social, ambiental y de gobernanza.