El movimiento #J2 asevera que en muchos casos sus pensiones se quedan por debajo de las no contributivas

Miles de Abogados organizados en Movimiento #J2 han denunciado a través de un comunicado las «pensiones irrisorias» y la falta de coberturas al haber «quedado atrapados en el nefasto sistema de la Mutualidad de la Abogacía, alternativo al Régimen de Autónomos».

La Mutualidad, con la colaboración de sus colegios Profesionales, siempre «prometieron que pagando menos que en RETA quedarían pensiones similares o más altas que las del sistema público. La realidad es que quedan unas rentas vitalicias, de entre la mitad y un tercio de la mínima del RETA, y en muchos casos por debajo de una no contributiva, lo que obliga a seguir trabajando sin poder jubilarse».

Se trata de un problema social «grave que no debe seguir oculto, por lo que se insta al Gobierno y los grupos políticos a darle una solución: se debe abrir una ventana al RETA, para trasladar los fondos que cada abogado ha acumulado, tras años de aportaciones, al sistema público  de pensiones e integrarse en el mismo».

Los abogados mutualistas agrupados en Movimiento #J2 se plantan frente al Fondo alternativo al RETA de la Mutualidad de la Abogacía e «instan la paralización de la Asamblea General del 17 de junio. Denuncian que la Mutualidad está incumpliendo la Ley y no les permite participar en las Asambleas, por lo que han Convocado una Concentración a las Puertas de la Asamblea para ese mismo día».

EL MOVIMIENTO #J2 y EL PROBLEMA DE LAS PENSIONES DE JUBILACIÓN

Movimiento #J2 «denuncia y da visibilidad a un grave problema social que debe ser abordado de inmediato, al no poder seguir manteniéndose por más tiempo oculto. Los Abogados que están en la Mutualidad de la Abogacía no se pueden jubilar, porque les quedan pensiones irrisorias, casi en el límite de una no contributiva».

La Mutualidad de la Abogacía es «un sistema de cotización alternativo al Régimen de Autónomos, creado y potenciado por los Colegios Profesionales, que proviene de tiempos preconstitucionales que, en la actualidad, no tiene ni sentido, ni viabilidad, porque no cumple el fin para el que fue creado: asegurar unas pensiones dignas a los abogados y una coberturas socio-laborales acordes a los tiempos actuales».

Las Mutualidades alternativas al RETA son «una reminiscencia del pasado que ya no se sostiene más, porque en la sociedad actual se han normalizado unas prestaciones sociales públicas, que la Mutualidad no puede ya prestar de una forma competitiva».

El problema «no es solo para los abogados, sino también para el resto de mutualidades alternativas, siendo por ello que ya se están extendiendo las reivindicaciones a otros colectivos, como los procuradores, por cuanto el problema es común para todas ellos y debe ser abordado de una manera global».

En el caso de los abogados, «desde la Mutualidad de la Abogacía, con la colaboración de sus colegios Profesionales, siempre prometieron que pagando más o menos lo mismo que en RETA quedarían pensiones similares a las del sistema público. La realidad es muy distinta: pensiones de 300 o 400 euros y, estimaciones para dentro de 20 años de 600 euros, que, además, no se actualizan. Por lo que hablamos de recibir una renta vitalicia dentro de 20, 30 o 40 años de 600 euros, cuando actualmente el mínimo del RETA, en 12 pagas, es de unos 920 euros y se va actualizando según IPC todos los años».

Lo que ocurre en la práctica es que «al final los abogados directamente no se pueden jubilar, tienen que seguir trabajando, hasta que, ya ven que no les quedan muchos años de vida y entonces comienzan a solicitar la entrega de sus fondos acumulados. No es raro por ello ver abogados trabajando hasta los 80 años, sin que tampoco lo puedan denunciar, porque tienen que mostrarse activos y operativos», han señalado.

A lo anterior hay que sumar una «falta de coberturas elementales, como que, en caso de enfermedad, solo reciben una muy pequeña asignación durante un máximo de un año, o que por ejemplo las bajas por enfermedad mental solo se cubren durante un total dos meses para toda la vida, por lo que, consumidos esos tiempos, se quedan sin cobertura alguna y totalmente desprotegidos».

ORIGEN: «DISCRIMINACION HISTORICA, RECOMENDACIÓN POR LOS COLEGIOS PROFESIONALES Y FALTA DE SUPERVISIÓN ESTATAL».

La realidad es que todo parte de una «discriminación histórica. Hasta el año 1995 los Abogados sufrimos una discriminación en relación al resto de la población: no podíamos elegir como sistema de jubilación, el público, lo que habitualmente se conoce como régimen de autónomos o RETA; se nos obligaba, como única opción posible, a adherirnos a un sistema privado, la Mutualidad de la Abogacía».

Según señalan desde el movimiento, «en los años posteriores se abrió la posibilidad de optar por uno u otro sistema, pero no puede obviarse que, desde las estructuras institucionales de la Abogacía, que no dejan de ser entes públicos, se potenciaba y recomendaba, en ocasiones apelando a la solidaridad con los compañeros que ya estaban integrados en la Mutualidad (a día de hoy se sigue haciendo), la permanencia dentro de la Mutualidad y la elección de la misma para los nuevos colegiados».

«Siempre nos aseguraron mejores prestaciones y pensiones ligeramente superiores a las del RETA para pagos a lo largo de la vida profesional similares».

«Todo ello generó que muchos quedaran atrapados en un sistema alternativo al público, la Mutualidad que, luego, por nueva reforma legal, dejó de asegurar pensiones vitalicias equivalentes al RETA, para constituir en esencia un plan de pensiones individuales, que con el tiempo comprobamos que no está dando los resultados prometidos, se encuentra muy lejos de lo asegurado y facilita pensiones vitalicias ridículas».

«Ahora, nuevamente se vuelven a realizar reformas legislativas que afectan al sistema de protección mutual alternativo al público, inicialmente impuesto, posteriormente alabado e incentivado, para luego ser transformado, y una vez más, se realiza sin contar con la opinión del colectivo afectado: los Abogados mutualistas. Se tratan más bien de nuevos parcheados a un sistema caduco, privado, extraño en relación al resto de trabajadores, desde la Mutualidad se acatan, sin explicaciones y sin mayor oposición ni búsqueda de alternativas».

Por su contra, «los abogados constatamos como nuestros compañeros más mayores no se pueden jubilar, y que las estimaciones de los que somos un poco más jóvenes podamos hacerlo son cada vez más irreales».

«Se trata de un problema social, que parte de la discriminación expuesta, de las variaciones legales referidas y de una falta de supervisión por parte del Estado que lo ha permitido mirando para otro lado. No debe seguir siendo obviado, ni ocultado, ni parcheado, sino que por el contrario debe ser abordado sin dilación y con carácter urgente, para encontrarle soluciones».

Además, los abogados mutualistas agrupados en Movimiento #J2 «nos plantamos frente al Fondo alternativo al RETA de la Mutualidad de la Abogacía e instamos la paralización de la Asamblea General del 17 de junio, porque la Mutualidad está incumpliendo la normativa y sus propios Estatutos. A las Asambleas no se permite ir a los mutualistas, sino que van unos representantes elegidos previamente en cada colegio y además no se está respetando que las cuestiones que afectan a mutualistas alternativos sean votadas solo por estos o al menos, por representantes de estos. Es por ello, que se ha Convocado una Concentración a las Puertas de la Asamblea para ese mismo día, para protestar frente a la Mutualidad y también para alertar del grave problema social existente.

LAS REIVINDICACIONES DEL MOVIMIENTO #J2

Desde Movimiento #J2, visibilizamos, proponemos, abrimos el debate y exigimos soluciones, planteando una serie de reivindicaciones.

  1. Mejoras fiscales en fase de Jubilación.

La Mutualidad de la Abogacía para los profesionales que la tienen  como sistema alternativo al  RETA no puede ser considerada un simple plan de pensiones complementario. Los importes acumulados son escasos y en la mayoría de los supuestos permiten unas rentas mensuales (pensión) muy reducidas. No resulta justo que la recuperación de los importes, encima tributen, cuando cumplen la función de ser una pensión de jubilación. Distinto serán aquellos supuestos o capitales que por haberse realizado aportaciones extraordinarias significativas supongan el equivalente a pensiones públicas elevadas. En general, solicitamos la exoneración impositiva y su mejora tanto en fase de aportación como de rescate.

2. Ventana de traslado al RETA.

    El Estado no nos ha protegido como debe e incluso nos ha discriminado, imponiendo obligatoriamente la cotización solo a través de la Mutualidad, y posteriormente, incentivándose la opción por dicho sistema privado. Los mecanismos de protección y control establecidos nos han fallado, realizándose además reformas legales que nos han perjudicado, de modo tal que, en actualidad, hemos quedado atrapados por un instrumento y mecanismo del sistema financiero, no adecuado para satisfacer las necesidades económicas inherentes a la jubilación y vejez de las personas.

    Se debe por ello establecer una ventana para que exista la posibilidad, puntual y voluntaria, de que los Mutualistas que lo deseen puedan recuperar sus aportaciones con destino al RETA y canjear su capital acumulado por años de cotización. En este sentido se computarían los años de cotización en la Mutualidad y se convertiría el capital acumulado en bases de cotización al RETA.

    Los abogados que todavía no hayan alcanzado la edad o años de jubilación, pasarían a cotizar por el RETA para complementar sus años e importes de cotización. En los supuestos en que, ya estén en edad de jubilación o hayan alcanzado los años necesarios para ello, pasarían al cobro de su pensión de jubilación pública. En cualquier caso, se debe garantizar a todos los Abogados, en función de sus años de ejercicio y cotización a la Mutualidad, el derecho a una pensión pública mínima digna, en condiciones similares a los cotizantes en RETA.

    1. Mejoras en la compatibilidad cobro de pensión y ejercicio profesional.

    Dada la situación actual que se ha generado, en muchos casos, las pensiones que vía Mutualidad o vía RETA, muchos abogados van a percibir a pesar de las mejoras solicitadas y, dado que necesitan de un tiempo para que las anteriores mejoras den resultados, van a ser muy insuficientes. Esta cuestión constituye un problema social que debe ser abordado. Es por ello que muchos abogados,

    incluso con la implementación de las mejoras que conllevan de los puntos anteriores, van a tener la necesidad de compatibilizar el cobro de sus exiguas pensiones con el ejercicio profesional, aunque sea de una forma más reducida. Por ello se debe mejorar la posibilidad de compatibilizar jubilación a efectos de cobro de pensión con el mantenimiento del ejercicio profesional.

    ¿QUÉ ES EL MOVIMIENTO J2?

    Movimiento #J2 es un movimiento de generación espontánea que, en realidad, nace de la indignación de miles de Abogados mutualistas alternativos al RETA y que cotizan en la Mutualidad de la Abogacía.

    El origen de Movimiento #J2 es un chat de WhatsApp en el que alguien escribe para poner de manifiesto las irrisorias rentas vitalicias (no son pensiones de jubilación, porque no tenemos) que están muy por debajo, en numerosos casos, de la pensión mínima que establece el RETA y a años luz de lo que la propia Mutualidad prometió a todos los profesionales.

    A partir de ahí el chat se viraliza con miles de compañeros preocupados por la situación hasta el punto de que resulta necesario abrir varios chats alternativos. Movimiento #J2 es simplemente el nombre elegido como emblema para canalizar todas esas ganas de revertir el problema, pero lo importante son las personas que lo componen.

    Actualmente, miles de activistas, organizados en chat generales, provinciales y pequeños grupos de trabajo, hablan, debaten, estudian, analizan y organizan acciones para dar a conocer sus reivindicaciones, todo para abrir una negociación con los partidos políticos y el Gobierno, a fin de buscar una solución a lo que es un grave problema social que debe ser abordado.

    Somos un Movimiento social reivindicativo, al margen de ideologías, desjerarquizado, que aglutina a miles de abogados, que utilizan las redes sociales como primer medio de reivindicación y ya hemos logrado aparecer en diversos medios de comunicación (televisión y radio de ámbito nacional), logrando una gran presencia en Twitter, donde nuestra cuenta alcanza ya los 1.750 seguidores. En nuestro grupo privado de Facebook ya somos más de 2000. Utilizamos mensajes muy ácidos, que muestran y explican  las deficiencias del sistema, como principal arma de reivindicación.

    Desde Movimiento #J2 entendemos que la situación se hace inviable. Ha llegado el momento de visibilizar el problema y exigir soluciones a las Administraciones Públicas. El 17 de junio, desde las 9.00 horas, esperamos poner de manifiesto toda la problemática en una Concentración, estando previsto que se sumen compañeros de todo el país. Esta se celebrará en Eduardo Dato 20, de Madrid, durante las horas y en lugar en la que la Mutualidad de la Abogacía pretende celebrar su Asamblea General.