Tinto Noticias se suma a la conmemoración del Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto recordando a las siete víctimas de la Cuenca Minera: Alfredo Gómez López, Amador Maldonado García, Francisco Fernández Villavieja, Nicomedes González Pablo, Pedro López Martín, Román Navarro Valera y Francisco López Bermúdez
Los seis nervenses y el campillero que fueron asesinados en el campo de concentración nazi de Mauthasen-Gusen son recordados este martes en todo el mundo con motivo de la conmemoración del Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto.
TINTO NOTICIAS -El periódico de la Cuenca Minera de Riotinto- ha querido sumarse a esta celebración y homenajear a las siete víctimas de la Cuenca Minera de Riotinto que sufrieron aquel horror nazi, en el que murieron 4.427 españoles, 11 de ellos de la provincia de Huelva.
Esta redacción ha extraído tales cifras de la publicación realizada el pasado 9 de agosto por el Gobierno de España en el Boletín Oficial del Estado (BOE), donde se publicaron los datos de los 4.427 españoles que murieron en el campo de concentración nazi de Mauthausen-Gusen entre 1940 y 1945.
Entre ellos aparecen, tal y como ya informó entonces este periódico, un total de seis personas de la Cuenca Minera: Alfredo Gómez López, de Nerva, fallecido el 17 de noviembre de 1941; Amador Maldonado García, de El Campillo, fallecido el 16 de octubre de 1942; Francisco Fernández Villavieja, de Nerva, fallecido el 10 de diciembre de 1942; Nicomedes González Pablo, de Nerva, fallecido el 22 de agosto de 1941; Pedro López Martín, de Nerva, fallecido el 22 de julio de 1941; y Román Navarro Valera, de Nerva, fallecido el 11 de enero de 1942.
Los seis fallecieron, concretamente, en el campo de Gusen, al igual que una séptima persona que hay que añadir, Francisco López Bermúdez, quien, aunque nacido en Aracena, residía en Nerva, municipio en el que llevó a cabo toda su actividad política que motivó su apresamiento en el campo de concentración nazi. López Bermúdez falleció en Gussen el 30 de diciembre de 1942.
El objetivo de la publicación de los nombres de estas personas, cuyas defunciones nunca fueron inscritas en el Registro Civil, fue, por un lado, que sus descendientes puedan cotejar los datos disponibles, y por otro, reconocerlas y devolverles la dignidad, una dignidad que fue así devuelta así a esas siete personas de la Cuenca Minera de Riotinto: seis de Nerva y una de El Campillo.
La lista publicada en el BOE fue coordinada por un grupo de historiadores dirigidos por el profesor de la Universidad Complutense de Madrid, Gutmaro Gómez Bravo, tal y como adelantó el diario El País, donde el profesor aseguró que “hay datos de apellidos o lugares de origen que pueden ser erróneos porque muchos prisioneros de guerra tenían miedo de que hubiera represalias contra sus seres queridos o compañeros políticos”, motivo por el que se abría un proceso de alegaciones.
Además, cuando la España franquista recibió los archivos, los escondió, lo que impidió que los familiares de las víctimas pudieran reclamar compensaciones a Alemania y a Francia, añadió el director del grupo de historiadores, quienes, además de los 4.427 nombres que aparecen en los libros de la sede del Registro Civil Central, incluyeron a otros 695 fruto de su trabajo de investigación.